El Defensor del Pueblo ha alertado de que, «pese a un mandato constitucional, en no pocas ocasiones» debe recordar a las administraciones públicas que la protección y el enriquecimiento del patrimonio artístico y arquitectónico «constituyen obligaciones fundamentales».
«Todos los poderes públicos están llamados, por imperativo constitucional, a actuar en defensa de la integridad de sus patrimonios, y para ello han de adoptar todas las medidas pertinentes para conservar las edificaciones que por su antigüedad o valor histórico o estético constituyen singularidades», ha señalado la institución en su informe anual del 2019.
En este apartado de patrimonio histórico, el documento al que ha tenido acceso Europa Press señala que en 2018 se iniciaron dos actuaciones de oficio «por el deficiente estado de abandono y la necesidad de restauración y rehabilitación de dos inmuebles».
El primero de ellos es la ermita de Santa María la Antigua, el templo románicomudéjar más antiguo de Madrid, declarada Bien de Interés Cultural. Tal y como señala la institución, a pesar de la protección que le otorga esta declaración, su deterioro es «progresivo y precisa de una rehabilitación urgente».
Tras solicitar información, la consejería de cultura madrileña remitió un informe en el que aclaraba que la ermita es titularidad del Arzobispado de Madrid, por lo que este es el principal responsable de su estado de conservación. Añadía que la Comunidad de Madrid llevaba años trabajando conjuntamente con los técnicos del arzobispado en este asunto.
Como fruto de este acuerdo, se ha financiado, a través del convenio de colaboración con la Provincia Eclesiástica de Madrid, la elaboración del proyecto de restauración y las obras necesarias. Asimismo, se ha constatado que el ayuntamiento está adoptando medidas para garantizar que la propiedad efectúe las reparaciones necesarias para garantizar un estado adecuado de conservación de la ermita.
EL TEATRO FLETA (ZARAGOZA)
El segundo de los inmuebles cuyo deficiente estado de conservación motivó el inicio de una actuación de oficio es el denominado Teatro Fleta, en Zaragoza, edificio protegido e incluido en el Catálogo de Edificios y Conjuntos de Interés.
El edificio es de titularidad del Gobierno de Aragón. Tras las indagaciones llevadas a cabo en 2018 y 2019 por el Defensor del Pueblo, puede concluirse que no se han producido grandes avances y, de hecho, ha continuado el deterioro del inmueble.
«Esta institución es consciente de que las administraciones públicas disponen de recursos limitados para ejercer sus competencias de este ámbito. Sin embargo, también tienen el deber de velar por la conservación, defensa, recuperación y mejora de los bienes que integran su patrimonio», ha lamentado.
En este caso concreto, no consta que en el pasado se dictasen medidas para evitar el deterioro en el que hoy se encuentra el teatro, ni que se ordenase la ejecución de las obras necesarias para su conservación e integridad «ni tampoco se están adoptando ahora».
EL DOLMEN MÁS IMPORTANTE DE ESPAÑA
Además, la institución hace un aparte para abordar el estado de conservación del dolmen de Guadalperal (Cáceres). En agosto de 2019 la sequía dejó a la vista un dolmen de unos cinco mil años de antigüedad, que se encontraba sumergido desde 1963 bajo las aguas del embalse de Valdecañas.
Según los expertos, se podría tratar del dolmen más importante de España. Al parecer, el denominado dolmen de Guadalperal (Cáceres) estaba entonces comenzando a sumergirse en las aguas del embalse ya que el pantano estaba empezando a recuperar su caudal al haber finalizado el período de trasvase que todos los años durante el verano establece el convenio de Albufeira entre España y Portugal para el aprovechamiento sostenible de las aguas entre ambos países.
Se produjo un debate entre los expertos que pedían que se sacaran las piedras, conservando la estructura, y que se llevase por encima del nivel del agua; y aquellos otros que consideraban que el traslado del conjunto megalítico supondría una pérdida irreversible en su contexto histórico-arqueológico.
La institución se encuentra a la espera de recibir de parte de la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes de la Junta de Extremadura información relativa sobre el estado de conservación del conjunto megalítico y de las medidas que tuviera previsto adoptar para garantizar su protección.