El auge de la modalidad de inversión conocida como acciones fraccionadas, que ha sido introducida al país hace un par de años, empieza a cobrar cada vez más fuerza mientras el mercado del euro se tambalea y los españoles buscan alternativas de diversificación financiera.
Hasta hace relativamente poco, invertir en la bolsa era un tema complejo y parecía completamente lejano para alguien que no es broker o que no está involucrado con la industria financiera. Si sabíamos algo era porque lo veíamos en alguna película o nos enterábamos por las noticias si había alguna situación polémica en wall street.
Pero a medida que surgen nuevas herramientas digitales, tan accesibles como revolucionarias, las cosas están cambiando. Más aún estos últimos meses, ante la proyección de un periodo de recesión en la comunidad económica europea, todos se encuentran buscando alternativas que les permitan mantener el valor de sus ahorros.
Las acciones fraccionadasson un tipo de inversión que permite a cualquier persona adquirir cierto porcentaje de la acción de una empresa. Con esta modalidad, más amigable con los usuarios que no tienen un perfil financiero; no es necesario adquirir una acción entera, sino que se puede comprar sólo una parte con una mínima inversión.
Lo que esto quiere decir es que cualquier persona puede invertir en grandes empresas como Google, Amazon o Tesla con unos pocos euros (de algunas empresas se puede comprar incluso acciones fraccionadas desde 1 euro o 1 dólar), de forma muy fácil y con un riesgo bajo.
Por ejemplo: digamos que una acción de Amazon cotiza hoy alrededor de los 1000 euros (cifra hipotética). No cualquiera tiene esa cantidad disponible para “aventurarse” en la bolsa. Pero si alguien tiene un capital 300 euros, y quisiera invertirlos en acciones, puede comprar el 0.30% de una acción de Amazon y recibir los dividendos proporcionales.
El procedimiento se hace a través de plataformas o “brokers”, especializadas por una comisión que varía en cada una. Algunas de estas plataformas ofrecen fracciones de acción tan bajas como 1/100, sin valor mínimo de entrada, lo cual permite a cualquier persona “jugar” a ser trader en los mercados financieros globales.
El procedimiento puede ser tan fácil como abrir una cuenta en una de estas apps y llevar a cabo un proceso de verificación de datos (a veces basta con dar pruebas del país de residencia) y añadir fondos a la app para comenzar a invertir. Muchas plataformas ofrecen sus mismas herramientas de formación para ayudar al trader en todo lo relacionado a acciones fraccionadas.
Otra ventaja de invertir en acciones fraccionadas es que se puede elegir entre cientos de empresas de todo el mundo. Más aún, se pueden comprar varias acciones fraccionadas de varias empresas diferentes, lo que hace que la cartera de inversiones sea lo suficientemente diversa para ser estable. Siempre se recomienda leer análisis recientes para evaluar cuáles son las mejores empresas para comprar acciones al momento de invertir.
Invertir en acciones fraccionadas también es una gran oportunidad para los traders o pequeños inversores que están empezando a operar en la bolsa y desean adquirir un poco de práctica si invertir grandes sumas o someterse a una posible volatilidad en el mercado global.
Lo importante al empezar en el mundo de las acciones fracciones, especialmente si se cuenta con poca experiencia, es elegir muy bien la plataforma o broker con que se va a operar. Se recomienda elegir una empresa de reputación internacional, regulada por los organismos que apliquen, que ofrezca mecanismos de protección legal y protección de fondos.
Pero aún así, no se trata de una operación exenta de desventajas. La mayoría de las veces, quien adquiere acciones fraccionadas no tiene derecho a voto sobre los asuntos que conciernen a la empresa. Tampoco se maneja la misma liquidez que en el caso de una acción completa.
Las acciones fraccionadas no son sino una de las vertientes de un proceso mucho más global e inminente: la democratización del sistema financiero. Nuevas posibilidades digitales, aceleradas y difundidas después del afianzamiento de la blockchain, las criptomonedas y los NFTs, generan soluciones que se adaptan mucho mejor a las nuevas generaciones y el estilo de vida actual.