La situación del sistema de solicitud de asilo y refugio en España está colapsado. Mientras las autoridades del Ministerio del Interior y el Ministerio de Integración, Seguridad Social y Migraciones enfocan todos sus esfuerzos en darle todo el apoyo a los desplazados ucranianos, la cifra de otros migrantes que llegan al país a solicitar protección internacional, se incrementa y llega a como estaba en los años pre pandemia.
A España han llegado 134 mil ucranianos, desde que comenzó la invasión rusa en febrero de este año, que han recibido una residencia temporal y ayer las autoridades aprobaron una ayuda de 400 euros para cada familia ucraniana que están fuera del sistema de acogida y que no disponen de recursos; ayuda que se prolongará por los próximos seis meses.
El detalle está en que no solo los ucranianos son los extranjeros que han llegado al país huyendo de situaciones adversas y es por ello que desde la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) exhortan a las autoridades del Gobierno a brindar la misma atención a quienes llegan al país en busca de protección internacional.
«Nosotros lo que pedimos es que esos mismos recursos materiales y humanos que se están empleando para tener un control sobre la población ucraniana que está llegando al país, se utilicen también para atender a quienes llegan y desean manifestar su voluntad de solicitar protección internacional, que es una circunstancia diferente a la que tienen los ucranianos, pero que también necesitan ser atendidos», expresó Paloma Favieres, directora de Políticas y Campañas del CEAR.
Favieres señala que es importante que, en vista del colapso que tiene el sistema, se dé prioridad al menos a la etapa de manifiesto de voluntad de protección internacional a las personas que continúan llegando a España, de manera que haya un registro actualizado, con cifras reales, porque la realidad es que en este momento hay un retraso importante en el sistema de citas; en el caso de los ucranianos a ellos les otorgan una protección temporal, pero apenas llegan al país ya son registrados y favorecidos.
En el caso de quienes llegan a España a pedir asilo o refugio, tras la manifestación de la voluntad, comienza un proceso de sustanciación que de cuerdo con la Ley de Asilo que establece que las autoridades tienen un mes para admitir la manifestación a trámite, tres meses para resolver los expedientes, en casos urgentes y seis meses para casos ordinarios. Tampoco se cumple la orden de que el migrante que llega al país con la intención de pedir protección internacional tiene un mes para manifestar su voluntad, pues en las oficinas policiales todo se maneja de manera telemática y para poder conseguir una primera cita, transcurren entre seis y ocho meses, de acuerdo con la ciudad donde esté la persona.
El CEAR creó una campaña en redes sociales donde invita a las personas a dejar su firma para impulsar una petición a España, para que atienda de la misma manera que atiende a los ucranianos, a todos aquellos extranjeros que llegan al país huyendo de otras guerras y de otras situaciones de conflicto.
«Todas las personas refugiadas merecen protección» dice el texto que da marco a la campaña, donde además destacan que las personas no solo huyen de la guerra en Ucrania. «Pedimos a España y a la UE -Unión Europea- que tomen medidas para garantizar el derecho de asilo y se garantice la protección a todas las personas que lo necesitan», dice la vocera del organismo que ayuda a los refugiados.
La semana pasada el propio ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, reconoció que la situación actual es de colapso y que en algunos puntos del país los recursos ya están llegando al límite, debido a la gran cantidad de refugiados que siguen llegando a España, tras la apertura de las fronteras, tras los dos años de parón que hubo por la pandemia ocasionada por la Covid-19.
Aunque el funcionario calificó esta situación como excepcional y temporal, la realidad es que la llegada de los desplazados ucranianos mantiene en total abandono a los demás migrantes que llegan huyendo de sus países, pues en la actualidad, el sistema de citas para pedir protección internacional está alargando los tiempos de espera hasta 2023 y 2024, dependiendo de la ciudad del país donde las personas decidan solicitar el asilo.
«Es que no hay personal y esa es la realidad. La solicitud de asilo se hace en las comisarías policiales y lo cierto es que la gente que está ahí, trabaja a tope y hace lo que puede. También es cierto que antes de 2019 no teníamos estos retrasos que tenemos pero hay una saturación del sistema que tiene que se redimensionado, en función de las necesidad que hay hoy en día», expresó la funcionaria del CEAR.
