Han circulado por las redes fotos del físico del campeón pugilístico Mike Tyson donde se aprecia un gran estado de forma, recordando el impresionante físico que le llevó a ganar dos veces el título mundial de los pesos pesados y ser el más joven en conseguirlo. Ahora volverá a los rings con 53 años pero pero por una buena causa: recaudar fondos para ayudar a los más necesitados. «Mi intención es ponerme en forma y poder hacer combates de tres o cuatro asaltos para la beneficencia. Para ayudar a personas sin hogar y con problemas de drogas, como me ocurrió a mí», ha declarado el ex boxeador. Pero antes de verle subirse al cuadrilátero de nuevo nos preguntamos: ¿cuál fue su último combate?
El 12 de junio de 2005 Iron Mike dijo tras su última derrota, tres de las cuatro últimas por nocáut: «No puedo hacerlo más (…). No puedo mentirme más. Es simplemente mi fin. Este es mi fin. Termino aquí». El modesto púgil irlándes Kevin McBride tiene el honor de ser el último boxeador que combatió con Mike Tyson y le derrotó. Además fue el primero en obligarle a retirarse tras el sexto asalto de los 10 programados en el MCI Center.
Pero el gran último combate lo protagonizó el 8 de junio de 2002 en el Pyramid Arena de Memphis, Tennesse (Estados Unidos) ante Lennox Lewis por el título mundial. Tenía 35 años y no había dejado el boxeo, aunque ya era el que fue debido a las drogas y el alcohol. Quizá era su última oportunidad de volver a ser esa leyenda pero acabó derrotado.
Venía de unos años convulsos y plagado de problemas. Tras su época dorada en los 80, la década de los 90 está plagada de polémicas y de derrotas también. Condenado en 1992 a 10 años de prisión por violación, tras tres años en la cárcel salió por buena conducta. En 1996 volvió a ganar el título pero pocos meses después lo perdió en su defensa ante Evander Holyfield. Un año después protagonizó el famoso mordisco en la oreja a Holyfield en la revancha, perdiendo el combate a causa de la descalificación.
#MondayMotivation courtesy of Mike Tyson 💪 pic.twitter.com/3T82Q67rHF— Boxing Exposure (@Boxing_Exposure) May 4, 2020
Ahora quiere demostrar su valía para paliar unos problemas sociales que él conoció bien, ya que se crió en el barrio de Bronx rodeado de prostitutas, malas compañías y peleas, lo que le llevó a intentar ser el más fuerte. Y lo fue durante un tiempo. Ahora Mike Tyson quiere volver a ser al menos en parte esa bestia del ring y parece que lo está consiguiendo. Rafael Cordeiro, su entrenador, da fe de ello y se mostró perplejo tras ves el estado de forma de Mike Tyson. «No sabía qué podía pasar. Llevaba casi 10 años sin ponerse los guantes. No esperaba ver lo que vi. Era un tipo con la misma velocidad y el mismo poder que los chicos de 21 o 22 años», ha reconocido.
