El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha reclamado al Gobierno este miércoles un giro y un cambio de política migratoria, tras la muerte la semana pasada de al menos 37 personas en el lado marroquí de la valla fronteriza de Melilla.
«Es imprescindible que hay un cambio de la política migratoria. La Ley de Extranjería condena a la ilegalidad a centenares de miles de personas que son vecinos nuestros, y que ven frenada su incorporación plena con derechos, libertades, integración laboral e igualdad de oportunidades», ha lamentado en la sesión de control en el pleno del Parlament en respuesta al diputado de ERC Josep Maria Jové.
Para Aragonès, lo que pasó en Melilla es inaceptable, por lo que ha criticado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por «felicitar una operación policial en la que los muertos se identifican, como mínimo, en 37».
Así, ha exigido de nuevo una «investigación a fondo» de lo ocurrido y ha preguntado dónde están los valores europeos en casos como los de Melilla o ante los muertos que hay cada semana en el mar.
«Esta Europa fortaleza debe convertirse en una Europa de los derechos y libertades. Y esto necesita de cambios en la orientación global«, ha sostenido el presidente catalán, que ha defendido que la paz no se garantiza con más armamento y sí con más alimentos, sobre todo en el contexto actual.
Según Jové, hay que exigir responsabilidades, por lo que la respuesta a lo ocurrido en Melilla no puede quedar «en una investigación más, que debe hacerse, pero tampoco felicitar actuaciones policiales que acaban con decenas de muertes, enterrar a los muertos de prisa y sin explicaciones ni identificaciones, y que haya refugiados de primera y de segunda».