La ola de calor experimentará un recrudecimiento este viernes con el aumento de las temperaturas máximas en el centro y en el norte Peninsular. Los termómetros subirán por encima de los 35 °C en gran parte de la Península y en Baleares, y se superarán los 40 °C en regiones del centro y sur de la Comunidad de Madrid, Valle del Guadiana y del Guadalquivir, Valle del Tajo y en la cuenca del Ebro oeste de Cataluña.
La entrada de aire fresco comenzará el este sábado, aunque no será hasta el domingo, 19 de junio, cuando se experimente un descenso acusado y generalizado del mercurio, especialmente en el norte y centro del país, que podría llegar a ser superior a los 10 grados en algunas zonas, según ha informado el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) Rubén Campo.
Madrid podría alcanzar este viernes 40 grados, al igual que Bilbao, Pamplona, Badajoz o Zamora y en Córdoba o Jaén se superarán los 42, lo mismo que en Zaragoza o Lleida, en un día en el que además, por la tarde se formarán nubes de evolución en zonas del interior con algunas tormentas aisladas que podrán estar acompañadas de fuertes rachas de viento. Otro aspecto a tener en cuenta el viernes es el riesgo de incendios, que será extremo en casi todo el país.
El sábado tampoco hay que «bajar la guardia», según Campo, pues todavía será una jornada muy calurosa en la mayor parte de España, especialmente en la mitad oriental, aunque la depresión atmosférica en niveles altos (DANA), que «ha estado inyectando aire muy cálido desde el norte de África, se habrá acercado mucho a la Península».
No obstante, «el aire fresco atlántico todavía no habrá abarcado el sábado todo el territorio y la bajada de las temperaturas sólo se notará en el tercio occidental peninsular, es decir, [a] Galicia, Asturias, Cantabria Oeste de Castilla y León, Extremadura y Andalucía Occidental».
El resto habrá ligeras bajadas de las temperaturas máximas o incluso ligeras subidas en puntos del nordeste donde se podrían superar los cuarenta grados y en Zaragoza, de nuevo, los 42 o 43 grados, al igual que Logroño y otras localidades de la ribera del Ebro, aragonesa, navarra y riojana, donde se pueden alcanzar los 42 grados con calor extremo. En Pamplona también se podría llegar a 41 grados, mientras que «Cáceres o Badajoz, ya inmersos en el aire fresco atlántico, superarán por poquito los 30».
«Hablamos de temperaturas entre diez y quince grados superiores a las normales en el tercio norte de la Península e incluso más de quince grados por encima de lo normal en Navarra y País Vasco; el calor será este sábado extraordinario también en el Cantábrico oriental y Navarra, en Galicia, Asturias y puntos del noroeste de Castilla y León», ha añadido Campo. Asimismo, habrá lluvias y chubascos tormentosos que podrían ser fuertes y en el resto se formarán nubes de evolución con posibles tormentas aisladas por la tarde.
PEQUEÑA BORRASCA EL DOMINGO
El domingo se formará una pequeña borrasca en el Golfo de Vizcaya que, desde su posición impulsará aire atlántico fresco, de modo que se producirá un descenso acusado y generalizado de las temperaturas, que podría ser de hasta diez grados o más, incluso hasta doce grados respecto al día anterior, sobre todo en el centro y norte de la península.
Habrá lluvias y chubascos en Galicia, Asturias y noroeste de Castilla y León, sin descartarlo en otras zonas del tercio occidental ni en el nordeste, donde podría haber algunos chubascos tormentosos.
Pero, a pesar de la bajada de las temperaturas, todavía hará calor en la cuenca del Ebro y oeste de Cataluña, al igual que en el interior de la Comunidad Valenciana Región de Murcia, Andalucía Oriental y Baleares, donde se superarán los treinta y cinco grados en las horas centrales del día o primeras horas de la tarde.
En el resto, habrá valores normales para la época o incluso frescos en Galicia, oeste de Castilla y León y Extremadura. Badajoz, por ejemplo, no pasará de 28 grados y Cáceres de 26 el domingo.
El lunes y el martes continuará con la influencia de las bajas presiones situadas en el Cantábrico y habrá cielos nubosos con lluvias y chubascos en el tercio norte peninsular. En el resto de la Península y Baleares cielos poco nubosos, aunque crecerán de nuevo nubes de evolución a partir del mediodía que darán lugar a posibles chaparrones tormentosos. Las temperaturas seguirán bajando en el Cantábrico oriental, área mediterránea peninsular y en Baleares.
En cualquier, lunes y martes en el ambiente continuará cálido, con temperaturas entre 5 y 8 grados por encima de lo normal para la época, pero en Galicia y oeste de Castilla y León, Extremadura y en Andalucía Occidental el ambiente, por el contrario, será fresco para la época, con valores que podrían estar allí entre cinco y diez grados por debajo de lo normal.
«Por ejemplo, las máximas previstas en Badajoz serán de unos 22 grados y de 19 en Salamanca. Sin embargo, en el área mediterránea del interior de la Comunidad Valenciana, puntos de Cataluña y Baleares todavía se podrán superar los treinta y cuatro grados», ha añadido el portavoz de la Aemet.
A partir del miércoles la tendencia no está muy clara todavía, pero lo más probable es que continúe la situación relativamente inestable en el tercio norte, con lluvias y chubascos por allí y ambiente más despejado.
De cara al próximo fin de semana, se espera una subida de temperaturas de forma generalizada.
En cuanto a Canarias, soplarán durante el fin de semana los vientos alisios con cierta intensidad, dejando rachas fuertes en zonas expuestas. Se esperan cielos nubosos en el norte de las islas más montañosas, con alguna llovizna por allí y cielos más despejados en el resto. El martes podría aumentar la nubosidad en el archipiélago con posibles chubascos dispersos y a partir del miércoles las precipitaciones se darán sobre todo en el norte de las islas de mayor relieve, con vuelta a los vientos alisios y ambiente despejado en el sur.