El ministro de Presidencia, Félix Bolaños, será el cuarto miembro del Gobierno de coalición al que recibe el Papa Francisco este 13 de junio. El Santo Padre ya se había encontrado anteriormente con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y la exvicepresidenta Carmen Calvo.
Además, el Papa recibió el pasado 18 de marzo a la nueva embajadora de España ante el Vaticano, Isabel Celaá, que previamente también había formado parte del Ejecutivo como ministra de Educación; y en mayo de 2019 saludó a la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, al coincidir en un evento sobre desarrollo sostenible y cambio climático en el Vaticano.
Así, Félix Bolaños no es el primer miembro del Gobierno de coalición al que recibe el Papa Francisco. El 11 de diciembre de 2021 recibió a la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, con quien mantuvo un encuentro de 40 minutos durante los cuales hablaron de los decretos legislativos que ha emprendido España para paliar la crisis.
«Hoy me he reunido con el @Pontifex_es en el Vaticano para dialogar sobre el trabajo decente, la crisis de la Covid-19 y el futuro del planeta. Construir un mundo más solidario y más justo solo es posible con diálogo entre diferentes en favor del bien común. Hay esperanza», tuiteó poco después de la reunión Díaz, que calificó el encuentro de «muy emocionante».
Además, el 24 de octubre de 2020, el Pontífice ya mantuvo un encuentro con el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, que acudió al Vaticano junto a su esposa, Begoña Gómez. En aquella ocasión, ambos mandatarios mantuvieron una reunión de 35 minutos y el Pontífice advirtió a Sánchez del peligro de las «ideologías» que se «apoderan» de la nación o de las «maniobras» que no responden a un acto de servicio.
Por su parte, Sánchez, en un mensaje a través de Twitter, agradeció al Papa el encuentro y destacó su coincidencia en «abordar la crisis ocasionada por el COVID-19 desde el multilateralismo y con una mirada social; protegiendo a los más vulnerables y avanzando, toda la sociedad unida, hacia un mundo más justo y solidario».
Además, un año antes, el 5 de octubre de 2019, la entonces vicepresidenta del Gobierno y ministra de Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad en funciones, Carmen Calvo, intercambió un saludo «cordial» con el Papa Francisco y con el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, durante el Consistorio Público para la creación de 13 nuevos cardenales, entre ellos, dos españoles.
Un año antes, el 29 de octubre de 2018, Calvo ya había acudido al Vaticano para reunirse con el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, para abordar, entre otros temas, la exhumación de los restos de Franco del Valle de los Caídos. Tras el encuentro, el Vaticano corrigió a Carmen Calvo sus declaraciones sobre el contenido de la reunión.
En concreto, Calvo anunció que el Ejecutivo y la Iglesia habían «acordado» trabajar juntos para «encontrar una salida» a la situación de la exhumación que, «obviamente», dijo, no podía ser La Almudena. Si bien, unas horas después, el entonces portavoz del Vaticano, Greg Burke, precisó que «en ningún momento se pronunció sobre el lugar de la inhumación», aunque vio «oportuna» la solución de explorar otras alternativas al entierro en La Almudena a través del diálogo con la familia.
Unos meses después, en febrero de 2019, el Gobierno hizo pública de forma parcial una carta de la Santa Sede en la que el secretario de Estado del Vaticano afirmaba que la Iglesia no se oponía a la exhumación. No obstante, otros fragmentos de la misiva desvelados más adelante por ‘El Independiente’, ponían de manifiesto que Parolin también trasladaba al Ejecutivo español que la exhumación era «competencia del Estado español» y que estaba «sometido al Derecho y a la Justicia española».
«HAN RESUCITADO A FRANCO»
Ya en junio de 2019, el entonces nuncio del Papa en España, monseñor Renzo Fratini, afirmó en una entrevista justo antes de jubilarse que el Gobierno pretendía «resucitar a Franco» con su proyecto para exhumar los restos del dictador del Valle de los Caídos.
«Sinceramente, hay tantos problemas en el mundo y en España. ¿Por qué resucitarlo? Yo digo que han resucitado a Franco. Dejarlo en paz era mejor, la mayoría de la gente, de los políticos, tiene esta idea porque han pasado 40 años de la muerte, ha hecho lo que ha hecho, Dios juzgará. No ayuda a vivir mejor recordar algo que ha provocado una guerra civil», señaló Renzo Fratini.
A raíz de estas declaraciones, el Gobierno envió una queja formal al Vaticano por la «injerencia» del nuncio. Calvo calificó las palabras de Fratini de «improcedentes e inaceptables». La queja fue entregada por la entonces embajadora de España ante la Santa Sede, Carmen de la Peña, y ese mismo día, la Santa Sede comunicó que el Papa Francisco había aceptado la renuncia del nuncio en España Renzo Fratini, que fue sustituido en el cargo por Bernardito Auza, actual nuncio apostólico en España.
ABUSOS E INMATRICULACIONES
El encuentro del Papa y Félix Bolaños se produce con varios temas de fondo que afectan a la Iglesia española como la investigación de los abusos sexuales a menores en el seno de la Iglesia española o las inmatriculaciones.
Sobre el primer asunto, está pendiente que se ponga en marcha la comisión liderada por el Defensor del Pueblo de la mano de un grupo de expertos para investigar los abusos acaecidos en el pasado en instituciones eclesiales. La creación de esta comisión fue aprobada por el Congreso de los Diputados el pasado mes de marzo, a propuesta del PSOE y el PNV, frente a la propuesta que habían presentado Unidas Podemos, Esquerra Republicana (ERC) y EH Bildu para que fuera una comisión parlamentaria la que investigara estos abusos.
Respecto a las inmatriculaciones, el ministro de la Presidencia se reunió el 18 de enero de 2022 con el presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y cardenal arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, y acordaron intensificar el trabajo en este sentido.
Unas semanas después, el 24 de enero de 2022, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitó la sede de la CEE y tras el encuentro, desde ambas partes, se dieron versiones opuestas. Según el Ejecutivo, habían acordado que 1.000 de los 34.961 bienes del listado de bienes inmatriculados hecho público por el Gobierno fueron inmatriculados indebidamente por la Iglesia, mientras que los obispos aseguraban que se trataba de 1.000 errores, un millar de bienes adjudicados erróneamente por el Gobierno a la Iglesia pero que no son suyos y, por tanto, no pueden devolver.
El vicedecano del Colegio de Registradores, José Miguel Tabarés, explicó, en una entrevista que todas las propiedades del listado de casi 35.000 bienes están «correctamente inscritas» y añadió que en el informe entregado por la CEE al Gobierno «en ningún momento se dice que la Iglesia vaya a devolver mil bienes», lo cual no quiere decir que no sean de su propiedad. De hecho, realizaron un muestreo sobre los bienes que a la Iglesia no le constan o sobre los que le faltan datos y concluyeron que los titulares de los mismos son los obispados.
Por otro lado, el encuentro de Bolaños con el Papa se producirá dos días después de la Asamblea final de la fase diocesana del Sínodo, en la que la CEE presentará una síntesis con las propuestas de los católicos para el Sínodo convocado por el Pontífice para octubre de 2023. Entre los asuntos que han planteado algunas diócesis, sobre los cuales, los católicos consideran que la Iglesia debe hacer una mayor reflexión se encuentran el celibato opcional o el sacerdocio femenino.