La Comisión de Igualdad del Congreso ha aprobado este miércoles el dictamen de la ponencia de la Ley de Garantías de la Libertad Sexual, conocida como ley de ‘solo sí es sí’, aunque su redacción no incluirá la recuperación de la tercería locativa.
Esta medida, que pena con hasta 3 años de cárcel a los dueños de prostíbulos, así como el cierre del local, no convencía a formaciones como ERC, EH Bildu, CUP, Junts, Ciudadanos o PNV, bien por su posición sobre la prostitución, como por su deseo de que este tema fuera tratado en una norma aparte de forma más específica.
Por este motivo, estos partidos han firmado una enmienda, impulsada por PNV y negociada con Igualdad (Unidas Podemos), para sacar de la ley los dos artículos que trataban sobre la tercería locativa y que, finalmente, ha salido adelante con el apoyo de los firmantes más el PSOE.
En cuanto al texto completo del dictamen, ha sido aprobado por todos los grupos, a excepción de PP y Vox. Sale así adelante la norma a pesar de que, al principio de la jornada, peligraba por la intención del PSOE de sacar adelante con el PP una enmienda que endurecía las penas por prostitución y que no apoyaban los socios del Gobierno en el Congreso.
Ha sido esta medida la que ha centrado el debate durante la sesión de la Comisión y ha provocado que muchos portavoces anunciasen sus dudas sobre apoyar o no el texto si esta iniciativa se incluía finalmente en la ley.
UN «CAMPO DE BATALLA» ENTRE FEMINISTAS
Desde Unidas Podemos, a través de su portavoz en el debate Martina Velarde, mostraron su preocupación ante la posibilidad de que esta ley «importantísima» no saliera adelante por «intereses partidistas»; mientras que la representante de ERC, Pilar Vallugera, ha advertido de lo «poco inteligentes» que habían sido los miembros de este órgano al convertir una ley que podría salir «con consenso total» entre las formaciones «progresistas» en «un campo de batalla» entre feministas.
El portavoz del PNV en este debate, Joseba Agirretexea, también ha criticado que «algunos» hayan querido «usar esta ley» para que los partidos «se posicionen en este tema» y que busquen solucionar un debate como el de la prostitución con una enmienda «únicamente punitiva».
«Nadie se ha acordado que el objetivo de esta ley es el ‘solo sí es sí’ ¿Por qué lo hemos pervertido?, ha señalado el diputado vasco.
Su homóloga de EH Bildu, Bel Pozueta, por su parte, ha afeado la «intransigencia» de los socialistas en materia de prostitución y que hayan llegado a «pactar con el PP a sabiendas que esta formación pone en peligro la ley». «Han pactado con nun grupo que pone en duda la existencia de la violencia machista y que prioriza otros intereses pactando con Vox para liderar comunidades autónomas», ha lamentado.
«No puede ser que el PSOE tenga una mirada estrecha cuando tenemos que llegar a acuerdos», ha declarado también en su intervención la portavoz de Igualdad de Ciudadanos, Sara Giménez. La diputada naranja se ha dirigido a los socialistas para pedirles que «reconduzcan» su posición y para que no se den «pasos atrás en la lucha de derechos de las mujeres por medallas partidistas».
EL PSOE DEFIENDE SU COMPROMISO
Frente a estos discursos, el PSOE ha defendido su compromiso con la norma y ha recordado que se trata de una «ley del Gobierno» y que la formación ha «trabajado en ella».
La portavoz socialista en esta comisión, Laura Berja, ha denunciado las «acusaciones de todo tipo» que ha recibido su formación y ha señalado que quien ha puesto «en peligro» esta norma son «todos los partidos excepto el PSOE» que, a su juicio, «nunca ha puesto en riesgo su posición» sobre la norma del ‘solo sí es sí’.
En este sentido, ha pedido «respeto» por las «posiciones legítimas» del partido que, según ha explicado, en su caso es la posición abolicionista de la prostitución que el PSOE aprobó en el congreso de su partido.
EN CONTRA PP Y VOX
Solo dos formaciones han votado en contra del dictamen de la ponencia: PP y Vox. Ambos partidos, de hecho, presentaron en su día una enmienda a la totalidad del texto.
Los ‘populares’ no apoyan la definición de consentimiento no que se hayan eliminado los dos tipos penales de abuso y violación que hoy se recogen en el Código Penal. Además, a su juicio, «la presunción de inocencia» se «tambalea» en este proyecto de ley, según ha explicado la portavoz del PP en esta materia, Marta González.
En su intervención, la diputada ha agradecido la «disposición» del Ministerio a la hora de negociar enmiendas en relación a l tercería locativa. Sin embargo, ha explicado que, para el PP, «el dictamen sigue siendo fallido».
Por su parte, la portavoz de Igualdad de Vox, Lourdes Méndez, ha alertado que esta norma «no es garantista», es «discriminatoria» y va «en contra del dictamen» de la ley de Igualdad de trato que el Congreso aprobó la semana pasada en la misma comisión. También considera que «adultera las relaciones más íntimas» convirtiendo en «sospechosos a todos los hombres que tenga relaciones sin un notario delante o suban en un ascensor sin un testigo».
Para Méndez, esta es una ley que «no va a disminuir lamentablemente las agresiones sexuales» pero sí dará «muchos problemas».
LA LEY
Al tener carácter orgánico, esta norma deberá ahora pasar por el Pleno del Congreso en donde deberá recabar la mayoría absoluta de la Cámara antes de continuar su tramitación en el Senado.
En su redacción se recoge una nueva definición de consentimiento que señala que «solo se entenderá que hay consentimiento cuando se haya manifestado libremente mediante actos que, en atención a las circunstancias del caso, expresen de manera clara la voluntad de la persona». Además, aúna los tipos penales de abuso y violación en uno solo.
Del mismo modo, recoge la protección a todas las mujeres, niñas y niños con independencia de su situación administrativa, su etnia o nacionalidad, así como a las víctimas de trata y explotación sexual bajo la premisa «todas las violencias, todas las mujeres».
Del mismo modo, se evita la revictimización de estas desarrollando medidas procesales de acompañamiento a las víctimas, incluyendo la posibilidad de evitar contacto visual con el presunto agresor o de declarar en salas especiales. Además, las mujeres víctimas de violencias sexuales tendrán recursos a su disposición aunque no denuncien, como los centros de crisis 24 horas, para las mayores de 16 años, o las casas de infancia para los menores de esa edad, entre otras medidas.