El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, se ha mostrado «satisfecho» con el ritmo en que España y Marruecos están llevando a la práctica la hoja de ruta que se marcaron tras el encuentro entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el rey Mohamed VI, defendiendo que todo avanza «sin pausa pero tampoco sin urgencias».
Así se ha pronunciado en vísperas de que se produzca su esperado encuentro con su homólogo marroquí, Naser Burita, con quien coincidirá este martes y miércoles con motivo de la reunión ministerial de la Coalición Internacional contra Estado Islámico y se reunirá de forma bilateral en los márgenes de esta cita.
«Tendré ocasión de encontrarme con mi colega», ha señalado en rueda de prensa junto a su nuevo homólogo portugués, Joao Gomes Cravinho, tras recordar que su encuentro del 1 de abril tuvo que suspenderse «porque había una entrevista aún mayor entre el presidente y el rey» de Marruecos.
Fruto de dicho encuentro celebrado el 7 de abril en Rabat, España y Marruecos publicaron una declaración conjunta en la que se estableció una hoja de ruta que «se está desarrollando con total normalidad», ha sostenido.
Así, ha recordado que la conexión marítima y aérea entre los dos países «se ha normalizado totalmente» y la semana pasada hubo sendas reuniones de preparación de la Operación Paso del Estrecho, que se recuperará este verano tras dos años de parón por la pandemia, y del grupo de trabajo en materia migratoria.
Según el ministro, el refuerzo de la cooperación migratoria «se constata sobre el terreno con caídas pronunciadas» principalmente en la fachada atlántica, donde las llegadas a Canarias han caído un 45%, pero también en Ceuta y Melilla y las costas andaluzas, así como por la reanudación de los vuelos de repatriación de migrantes desde el archipiélago.
«Todo va avanzando a su ritmo», ha defendido Albares, asegurando que los distintos grupos de trabajo seguirán celebrando reuniones, pero «una hoja de ruta tiene un tiempo para desarrollarse». «Queremos hacer las cosas gradualente, ordenadamente, sin pausa pero tampoco sin urgencias», ha recalcado.
«Estoy satisfecho con el ritmo con el que se está desarrollando el trabajo y la coordinación de esos grupos», ha rematado, recordando que algunos de ellos, como el de la delimitación de las aguas territoriales, llevan 15 años sin reunirse.