EEUU amenaza a Repsol con sanciones por su actividad en Venezuela

El enviado especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliot Abrams, lanzó ayer una velada amenaza contra la petrolera española Repsol por su actividad en la Venezuela de Nicolás Maduro. En rueda de prensa afirmó que espera «decisiones» por parte de Washington en los próximos días y el Gobierno de Pedro Sánchez cree que ello se traducirá en sanciones.

«La conclusión a la que llegamos es que el Gobierno español está muy preocupado por esto, pero creo que habrá decisiones tomadas en Washington en los próximos días», dijo en un encuentro con periodistas en Madrid.

El enviado de Donald Trump se reunió el miércoles con el secretario general de Asuntos Internacionales de Presidencia, José Manuel Albares, y con el secretario de Estado para Iberoamérica, Juan Pablo de Laiglesia. También mantuvo un encuentro con el expresidente del Gobierno Felipe González, cuyas impresiones sobre Venezuela quería conocer dada su larga trayectoria en la región.

Repsol EEUU Venezuela
El enviado especial de Donald Trump para Venezuela, Elliot Adams.

«Los responsables españoles mencionaron el caso», señaló sobre el caso de Repsol, y no fue «ninguna sorpresa» porque también lo está haciendo la propia empresa en Washington, donde hay «discusiones muy activas» y «el caso está recibiendo mucha atención«. No obstante, evitó dar detalles de en qué se traducirán esas decisiones de Washington y si tendrán impacto en la actividad de Repsol en Venezuela, presente en el país desde 1993.

«Conocemos los argumentos de Repsol, porque los han presentado, y estamos pensando formas de afrontar la situación que han descrito«, señaló Abrams antes de añadir que cuando él vuelva a Washington aportará también las «explicaciones» que ha recibido en Madrid. «Esperamos afrontar la situación pronto», sintetizó.

Preguntado si durante su viaje ha habido alguna «negociación» de nuevas sanciones que puedan afectar a empresas europeas, el enviado estadounidense puntualizó que no hay discusiones sobre sanciones, porque Estados Unidos adopta las que considera necesarias, y lo seguirá haciendo, y lo mismo hacen los europeos. Eso sí, reconoció que la cuestión de las sanciones, y en particular contra individuos, ha estado sobre la mesa.

Adams opinó que lo más lógico es que Maduro deje no solo el poder sino el país. En todo caso, aunque sigue convencido de que España puede ser un sitio donde se exilien responsables chavistas una vez que caiga el régimen, subrayó que discutido en Madrid sobre ello. Además, reconoció que algunos dirigentes  bolivarianos desearían ir a destinos donde puedan estar a salvo del Tribunal Penal Internacional, como Cuba o Rusia.

El enviado de Trump también subrayó que «todas las opciones», incluida la militar, siguen sobre la mesa, pero admitió que ese no es el camino que persigue Washington, centrado por el momento en organizar una presión internacional contra Maduro.

REPSOL HA REDUCIDO SU EXPOSICIÓN A VENEZUELA

Repsol ha proseguido recortando su exposición patrimonial en Venezuela, situándola a cierre de 2018 en 456 millones de euros, lo que supone una reducción de casi el 70% con respecto a los 1.480 millones de euros a que ascendía a finales de 2017, según Europa Press.

Según consta en el informe anual de la petrolera, la exposición al país latinoamericano, que incluye fundamentalmente la financiación otorgada a sus empresas filiales venezolanas, se ha reducido a lo largo de 2018 «significativamente», con unos saneamientos de más de 1.000 millones de euros, desde la exposición de 1.480 millones de euros con que contaba a cierre de 2017.

A cierre del tercer trimestre del pasado año, la exposición de la petrolera en Venezuela era de unos 796 millones de euros, por lo que la crisis política, económica y social, recrudecida en los últimos tiempos, en el país latinoamericano ha llevado a Repsol a continuar recortando este riesgo en el tramo final del año pasado.

El grupo presidido por Antonio Brufau ha procedido a realizar una evaluación de la recuperabilidad de sus inversiones, así como del riesgo de crédito sobre las cuentas a cobrar a PDVSA, que mantiene un acuerdo con Repsol de pago de deuda en forma de entregas de crudo.

Como consecuencia de ello, Repsol ha realizado unas provisiones por riesgos o deterioros reversibles de 1.159 millones de euros. En 2017, la partida por deterioros por Venezuela ascendió a 716 millones de euros. De este importe, ha registrado en reservas 316 millones de euros como consecuencia de la provisión por riesgo de crédito y otros 843 millones de euros en la cuenta de pérdidas y ganancias.