El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha asegurado que los intereses de España, y muy en particular los de Canarias, «siempre estarán defendidos» por parte del Gobierno frente a Marruecos un día antes del esperado encuentro entre el presidente, Pedro Sánchez, y el rey Mohamed VI.
Así se ha pronunciado ante el Pleno del Congreso de los Diputados después de que el diputado de Nueva Canarias Pedro Quevedo haya echado en cara al Gobierno su «respuesta debilísima» frente a las «acciones unilaterales para apropiarse de las aguas territoriales de Canarias» por parte del país vecino.
«Los canarios conocemos la política expansionista del reino de Marruecos, no solo el chantaje con la inmigración», ha sostenido el diputado canario, que ha exigido al Gobierno que rectifique en su decisión de apoyar el plan de autonomía marroquí para el Sáhara Occidental.
«Canarias es efectivamente una parte importante de nuestra relación con Marruecos y le aseguro que ocupa una parte importante de mi tiempo», le ha replicado Albares, que acompañará a Sánchez en su visita a Rabat de este jueves y viernes. «Los intereses de España y muy especialmente de Canarias estarán siempre defendidos, sobre eso no le quepa la menor duda», ha asegurado el jefe de la diplomacia.
Marruecos procedió a principios de 2020 a aprobar dos leyes por las que delimita el mar territorial marroquí hasta 12 millas y la zona económica exclusiva (ZEE) de 200 millas desde sus costas. Dicha delimitación entraba en conflicto con la delimitación de las aguas territoriales españolas en las islas Canarias, pero el Gobierno ha asegurado que ambos países desean resolver la cuestión de mutuo acuerdo y conforme a la Convención de la ONU sobre Derecho de Mar.
POSTURA SOBRE EL SÁHARA
Por otra parte, por lo que se refiere a la postura respecto al Sáhara Occidental, Albares ha repetido por enésima vez que esta cuestión «se tiene que resolver en el marco de Naciones Unidas y a través de una solución mutuamente aceptable» para las partes.
«Lo decimos en todos los foros», ha insistido, al igual que también lo dice Sánchez en la carta que envió a Mohamed VI el pasado 14 de marzo y en la que señaló que el plan de autonomía de 2007 es «la base más seria, creíble y realista» para resolver el contencioso.
Una vez más, ha defendido que ya el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero le dio la bienvenida y que con Mariano Rajoy se mantuvo ese reconocimiento en las cumbres con Marruecos, negando que se haya producido un giro o una «claudicación frente a la política chantajista» marroquí, como le ha reprochado Quevedo.
«Puede haber un paso más, puede haber una profundización, pero estamos dentro de la legalidad internacional», ha reivindicado el ministro de Exteriores, esgrimiendo que la postura española está en línea con la que mantienen otros países como Francia o Alemania.
