miércoles, 11 diciembre 2024

Desmienten a Abascal tras emitir una información falsa sobre Hungría

La plataforma detectora y contrastadora de noticias falsas ‘Newtral’ desmintió este martes al líder de Vox, Santiago Abascal, respecto a su afirmación el pasado 22 de abril en el Congreso con la que quiso dejar en mal lugar el Ejecutivo al compararlo con el gobierno húngaro: “En Hungría, ese país que echó a patadas a los comunistas, no ha hecho falta controlar el precio: el Gobierno ha enviado mascarillas a todos los hogares”, dijo Abascal.

La firma de Ana Pastor ha contactado con la Oficina de Comunicación Internacional del Gobierno húngaro, y este órgano ha negado tal información. Desde esta Oficina explican que su gobierno solo ha enviado mascarillas “al personal sanitario y otros trabajadores en la primera línea de combate al coronavirus”, así como a “personas sospechosas de contagio que ingresen en los hospitales”. Por tanto, es falso que Hungría haya enviado mascarillas a toda la población, como indicó el líder de Vox.

Asimismo, ‘Newtral’ detalla que la ministra de Sanidad del gobierno húngaro, Cecília Müller, dijo el 31 de marzo que la posición de su Ejecutivo en cuanto a mascarillas se iba a moldear en base a los criterios de la OMS. La Organización Mundial de la Salud recomendó en aquellos momentos «el uso prioritario de máscaras faciales para trabajadores de la salud, trabajadores de atención al paciente y miembros de las agencias de aplicación de la ley», por lo que no se consideraban necesarias para la población general.

FACTCHECKING A ABASCAL

Además, Müller anotó que «el uso incorrecto de máscaras faciales que implican tocar la cara con frecuencia puede ser peligroso». Lo mismo ocurre con los EPIs, materiales que se habrían repartido exclusivamente en hospitales o centros médicos.

Con todo ello, la Oficina de Comunicación Internacional de Hungría ha informado de que se ha dibujado ya un plan para la distribución de mascarillas y EPIs a medida que vayan llegando suministros. Las repartirán primero a sanitarios en UCIs, más tarde a contagiados y médicos en general y por último, a miembros de la Administración Pública. La población general sigue sin considerarse en este esquema.