El Gobierno de Estados Unidos estima que el déficit del país para 2023 se reducirá en 1,3 puntos porcentuales, hasta alcanzar el 4,5% del producto interior bruto (PIB), según se desprende del presupuesto federal que ha publicado este lunes la Casa Blanca para el año fiscal 2023, que va del 1 de octubre de 2022 al 30 de septiembre de 2023.
«Los presupuestos son declaraciones de valores, y el presupuesto que estamos liberado hoy manda un claro mensaje de que valoramos la responsabilidad fiscal, la seguridad en casa y en todo el mundo y las inversiones necesarias para continuar con nuestro crecimiento justo y construir un Estados Unidos mejor», ha subrayado el presidente del país, Joe Biden.
La Casa Blanca espera que el déficit presupuestario del país sea de 1,15 billones de dólares (1,05 billones de euros) en el conjunto de 2023, frente a los 1,415 billones (1,29 billones de euros) que se esperan para 2022.
Este nivel de déficit es el resultado de registrar ingresos fiscales a nivel federal por valor de 4,638 billones de dólares (4,22 billones de euros) y 5,792 billones (5,27 billones de euros) de gastos.
Pese a la abultada reducción del déficit en 2023 respecto a 2022, las previsiones para la próxima década se estancan en un déficit crónico de cerca del 4,5%. Lo mismo sucede con la ratio de deuda pública sobre el PIB, que cerrará 2023 situada en el 101,8% y durante los próximos 10 años seguirá por encima del 100%.
El nuevo presupuesto concibe una reducción del déficit en términos nominales de un billón de dólares (909.460 millones de euros). Mientras que la expansión de los programas de salud pública elevarán el déficit en 365.000 millones (331.953 millones de euros), el impuesto mínimo para milmillonarios lo reducirá en 361.000 millones (328.315 millones de euros), al tiempo que las inversiones y reformas adicionales supondrán una reducción del 1,413 billones (1,285 billones de euros).