La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, ha avanzado que ya son 93.000 los test de diagnóstico de coronavirus realizados a la población desde que comenzara la crisis sanitaria –casi 53.000 vía test rápidos–.
En rueda de prensa telemática desde el Palacio de Fuensalida, ha añadido que se han realizado 6.636 test rápidos a domicilio, 4.063 a residentes en centros de mayores, 1.873 a profesionales sanitarios, 370 a agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, 30 a personal de bomberos y 390 a personal de otros sectores esenciales.
A este extremo, Fernández ha recordado el refuerzo de 14.000 test en una estrategia autonómica que vendrá a complementar el estudio serológico en el que participará la Comunidad Autónoma; al tiempo que ha puesto de manifiesto que ya son 8,8 millones de unidades de protección sanitarias con el nuevo envío de este martes a centros hospitalarios. «Todo es poco, pero seguimos realizando esfuerzos en un mercado que es salvaje, muy difícil», ha apuntado.
DATOS «ESPERANZADORES»
Blanca Fernández ha revelado dos datos «esperanzadores» en cuanto a las buenas perspectivas del avance del coronavirus, reseñando que el índice de contagio se mantiene en el 0,8 –por debajo del 1, número «esencial» para empezar a afrontar la desescalada–; o que solo el 17 por ciento de los pacientes que llegan a los servicios de Urgencias de los hospitales regionales precisan de ingreso posterior.
Esta última tasa, ha recordado, está lejos de casi el 60% que llegó a registrarse en el peor momento de la pandemia, y ya se acerca a parámetros normales –del 13 al 15 por ciento–.
