Ander Gil insta a los parlamentos autonómicos a ser la «punta de lanza» contra la violencia machista

El presidente del Senado, Ander Gil, ha instado a los parlamentos autonómicos a convertirse en la «punta de lanza» contra la violencia machista y contra quienes niegan su existencia, una postura que ha tachado de «antidemocrática».

Así lo ha reclamado Gil este sábado en el acto de apertura de la Conferencia de Presidentes y Presidentas Autonómicos (COPREPA) que se celebra en Palma de Mallorca, en el que ha resaltado que es una obligación dar protección integral a las víctimas de la violencia de género.

«No podemos normalizar nunca esa violencia, porque cualquier número de mujeres o menores asesinados es inasumible, y cualquier número de mujeres agredidas es inadmisible», ha aseverado, para criticar a aquellos que niegan esta violencia.

Para Gil, el negacionismo machista es un comportamiento «grave y antidemocrático» que «desde las posiciones más retrógradas», sigue «negando la realidad de la violencia de género y de la desigualdad». «Debemos combatirlo con firmeza y determinación, porque quien niega la realidad es cómplice de ella», ha subrayado.

Por otro lado, ha alertado sobre «los populismos y los mensajes que descalifican a las instituciones» y ha advertido de que la representación democrática «ha perdido sentido».

Así, ha alentado a las parlamentarios a «alzar la voz» para que los «desinformadores y los populistas no ganen». «Ese es el verdadero cordón ético y sanitario frente al populismo», ha apostillado el presidente del Senado.

Por último, ha defendido el papel de los parlamentos «que son la esencia de la democracia» y, a su juicio, «tienen toda la fuerza para hacer frente al riesgo del populismo».

En este sentido, ha insistido en que el parlamentarismo «es más necesario que nunca» y ha reclamado «no rebajarse a los mensajes excluyentes, violentos o estereotipados del populismo». «Puede haber debates muy duros que transmitan que la democracia es respeto a las ideas del otro. En la casa de la libertad de expresión no hay que derrotarse, sino explicarse», ha concluido.