El expresidente del Gobierno Felipe González ha criticado la invasión de Rusia en Ucrania con el argumento de que «la guerra de Putin va a multiplicar por 100 los efectos de la pandemia en términos de devastación humana» en el segundo país, aunque ha resaltado que pese a haber generado este «problema gravísimo» el presidente ruso ha dado a la vez el «mayor impulso» a la «unidad» de los 27 países que conforman la Unión Europea.
Así, ha lamentado que «antes de que acabe la pandemia» algo «tan inesperado como que un autócrata con unos aires increíbles como Putin» haya sido capaz de «romper todo el orden» mundial invadiendo a un pueblo del que dice que «son hermanos», y ha mostrado su deseo de que «ojalá Putin pierda esta guerra».
«Ojalá Putin pierda esta guerra, yo tengo una esperanza en que la pierda… Se ha metido en una dinámica que probablemente no le dé salida», ha reconocido González, quien a continuación se ha preguntado «¿hasta dónde puede llegar un tipo con esa locura, con esa visión?»
En todo caso, y dentro de los fundamentos para que a su juicio funcionen las agrupaciones regionales con ámbitos de soberanía compartida o «supranacionalidad», el expresidente del Gobierno ha destacado que Europa está conformada por 27 países y que «Putin, que está creando un problema gravísimo (con la invasión de Ucrania), le ha dado el mayor impulso a la Unión Europea hacia la necesaria unidad de los 27».
De este modo se ha pronunciado el expresidente del Gobierno durante la conferencia inaugural –impartida este miércoles en Guadalupe (Cáceres)– del II Congreso Internacional ‘Relaciones entre América Latina, el Caribe y Europa: un espacio de encuentro’.
CONSECUENCIAS DE LA GUERRA
Al mismo tiempo, González ha alertado de los «efectos inmediatos» en toda Europa que ha provocado la «guerra de destrucción humana, física, cultural» de Putin en Ucrania; y se ha mostrado partidario de reforzar los «lazos» entre Europa y América Latina y el Caribe, y al contrario, para poder afrontar las consecuencias de dicho conflicto bélico y «para no depender tanto de los que no son confiables».
Así, ha invitado a hacer un «gran esfuerzo» a nivel europeo y de Europa para América Latina porque, a su juicio, en todos los ámbitos de la vida «hay que prepararse para lo peor» porque «si lo peor llega y uno está por preparar se acabó».
En este sentido, ha abogado por que Europa intensifique su relación con América Latina y el Caribe entre otras cosas por las «interdependencias necesarias», pero que «no ahoguen» sino con cadenas de suministros con «fundamentos para que funcionen».