La OTAN ha evitado valorar el ataque de las fuerzas rusas contra la base de Yavoriv, a 20 kilómetros de la frontera con Polonia, donde fallecieron al menos 35 personas, asegurando que no cuenta con personal en Ucrania.
Al ser preguntado por dicha ofensiva, un portavoz de la OTAN se ha limitado a señalar que la organización no cuenta con personal en Ucrania, sin realizar una valoración concreta sobre el ataque contra una base que se encuentra a escasos kilómetros de territorio aliado y que en su día fue centro de entrenamiento militar para el Ejército ucraniano.
«La injustificada invasión de Ucrania está provocando un sufrimiento y una destrucción incalculables. La condena todo el mundo y debe cesar», ha señalado el portavoz.
Las autoridades de Polonia no han dudado en señalar que el ataque es una amenaza para toda la alianza y han indicado que con esta maniobra, Moscú buscaba mandar un mensaje a la OTAN.
«Sabían seguro que esa base militar se encontraba muy cerca de la frontera polaca», ha aseverado. «Así que por supuesto los rusos sabían qué estaban atacando y querían amenazar a la OTAN», ha indicado el viceministro de Exteriores polaco, Marcin Przydacz.