Los niños han salido este domingo 26 de abril a la calle a dar un paseo por primera vez en 42 días de confinamiento, por el estado de alarma decretado por la pandemia del coronavirus COVID-19, y lo han hecho «como locos» al tiempo que» muy ilusionados», con sus «patinetes» y otros juguetes, y también aprovechando para acercarse a casa de los abuelos a verles a través de la ventana.
Álvaro, de 6 años , y su hermana Lara, de 4, han aprovechado la salida con su padre Miguel para ir a ver a los abuelos, que viven cerca, «para que les vean desde la ventana». Sus padres cuentan a Europa Press que los pequeños han salido a la calle «muy contentos», Lara con su muñeca Jazmin y Álvaro con su lagarto Álvaro. Eso sí, iban con la lección bien aprendida para evitar contagios pues, como relatan sus padres, «han bajado con las manos en los bolsillos para no tocar nada en las zonas comunes».
Por su parte, Laura, madre de Julia (5 años) y Pedro (2 años) cuenta que sus hijos «han salido como locos: Julia con el patinete y Pedro con la moto, iban a toda velocidad». Sobre la reacción de los niños, mientras Julia decía que le «encantaba» que le diera el aire, a la vuelta a casa Pedro iba ya en brazos de su madre. «Quería sentarse en el suelo, estaba cansado; como es más pequeño y lleva un mes y medio sin andar…», lamenta.
Mientras, Jose, padre de dos niñas de 11 y 9 años, ha explicado que sus hijas han salido con patinete y patines. «Se han portado bien y han vuelto agotadas», explica. También con su padre ha salido Lucas, de 20 meses, que «estaba muy emocionado y, según se ha bajado de la sillita, se ha puesto a correr sin parar hasta que ha pasado la hora completa».
«Se le notaba muy ilusionado por pasar de correr alrededor de la mesa del salón a correr alrededor del templo de Debod, y ahora en casa está especialmente emocionado y nervioso, después del paseo. Había unas cuantas personas adultas más paseando con sus niños, la sensación general era de alegría por volver a oír las voces de los pequeños», cuentan sus padres.
Precisamente Celia, que ha salido esta mañana a la calle con su hijo Mateo (9 de años), explica que «algunos padres con niños han aprovechado para hacer algo de deporte y salir a correr alrededor de la manzana. «Por la zona había algo de presencia policial en coche pero no pedían ninguna documentación, todo estaba muy tranquilo. La gente estaba muy separada, cumplían muy bien con las distancias y guardaban la fila», prosigue.
De este modo, durante el paseo han coincidido con «numerosos padres con niños, la mayoría con bicicletas, patines y patinetes; y casi todos con mascarillas, pero todos respetando la distancia de seguridad».
Por su parte, su hijo ha asegurado que «ha sido muy agradable volver a salir aunque sólo sea dar una vuelta». «Lo peor es que no he visto a ningún amigo y lo malo es que el parque estaba cerrado y los niños sólo podíamos pasear por la acera», prosigue el pequeño que se ha quedado «muy impresionado» con la cola que había en la panadería.
En Leganés (Madrid), Gema ha salido con su hijo Lucas, de 15 meses, en la mochila, a la espalda, como solían dar sus paseos antes del confinamiento. «Es muy pequeño, sin embargo es un niño tremendamente sociable, le encantan los perros pero sobre todo las personas», cuenta Gema.
Lucas ha permanecido «en silencio, observando» durante el paseo de casi una hora que han dado y durante el cual se ha fijado «en algún pájaro, algún árbol, pero sobre todo en los niños». «Ha estado tranquilo, observando, relajado, contento, alucinando con su vuelta a la vida», ha asegurado su madre, al tiempo que ha subrayado que «hoy es un día para recordar». «Espero que los adultos estemos a la altura de nuestros niños», ha añadido Gema.
LAS FAMILIAS NUMEROSAS, CON MÁS DIFICULTAD PARA SALIR
Mientras, Cristina y Raúl, padres de Inés (9 años), Raúl (6 años) y Loreto (3 años) se están pensando aún si salir o no a la calle porque consideran que, para un solo adulto, es complicado vigilar a los tres menores, sobre todo, teniendo una tan pequeña, de tres años.
No podemos bajar los dos a la vez con los tres, e ir uno solo con los tres, no lo vemos, sobre todo por Loreto», comenta a Europa Press la madre de esta familia numerosa, que se está planteando bajar a los pequeños por turnos. En todo caso, añade que los niños tampoco sienten la necesidad de salir a la calle porque tienen una terraza en la que han podido «moverse y correr» durante estos 42 días de confinamiento.