Feijóo dice que habla con Urkullu con frecuencia pero niega las elecciones

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha admitido que habla «con cierta frecuencia» con el lehendakari, Iñigo Urkullu, sobre la evolución de la pandemia del coronavirus y la desescalada en Galicia y en Euskadi, pero ha reiterado que la nueva convocatoria de las elecciones «no forma parte» de la agenda de su Gobierno.

Así se ha pronunciado el mandatario gallego en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consello de este viernes, misma jornada en la que su homólogo vasco decía que barajaba convocar los comicios de su Comunidad en julio. Tanto en Euskadi como en Galicia, los ciudadanos estaban llamados a las urnas para el 5 de abril, pero la pandemia del coronavirus motivó su aplazamiento.

En este contexto, y al ser preguntado al respecto, el presidente de la Xunta ha admitido que la legislatura «está a punto de ser agotada» en Galicia –en septiembre se cumplen 4 años de los comicios de 2016–. Pero las elecciones, vuelvo a reiterar, no forman parte de la agenda del Gobierno«, ha insistido.

Aunque no ha avanzado sobre si romperá la costumbre de que gallegos y vascos acudan a las urnas el mismo día, lo cual ocurre desde el 2009, ha vinculado la nueva fecha a la desactivación del estado de alarma por parte del Ejecutivo central y «a la evolución y la previsión» de la pandemia de la COVID-19.

«Y como estos dos parámetros no dependen directamente del Gobierno de la Xunta de Galicia, el Gobierno de la Xunta de Galicia lo único que puede hacer es ser prudente y no especular», ha añadido.

GALICIA Y EUSKADI SE PARECEN «BASTANTE»

No obstante, sí ha admitido que habla con el lehendakari «con cierta frecuencia sobre los temas de la pandemia» y las distintas medidas implementadas por el Ejecutivo vasco. En este mismo sentido, y aunque lo ha desligado de otra posible convocatoria electoral conjunta, Feijóo ha dicho que ambas comunidades se parecen «bastante» a la hora de entender y tratar «la pandemia y también la desescalada».

Precisamente, Urkullu señalaba este mismo viernes que «el riesgo de contagio puede estar en sus tasas más bajas en el mes de julio». Por el contrario, decía que el inicio del otoño podría coincidir «con un rebrote de la epidemia y, en ningún caso», se contará todavía con una vacuna. Para el lehendakari, «esta previsión aconseja estudiar la opción de una convocatoria electoral en el mes de julio».

Sobre este mismo punto, no obstante, Feijóo se ha mostrado cauto y ha vuelto a responder que las elecciones gallegas, que hay que celebrar «sí o sí», dependerán de cómo evolucione la pandemia en Galicia y de cómo se produzca la desescalada.

Además, el presidente de la Xunta, quien tiene la competencia de decidir y fijar los comicios autonómicos, ha reafirmado que los partidos de la oposición serán «consultados», tal y como también establece el decreto por el que se dejó sin efecto la convocatoria del 5 de abril. «Por supuesto que cumpliré este compromiso», ha garantizado.

Así, Feijóo ha adelantado en la rueda de prensa que citará al resto de formaciones «cuando toque» y «cuando tenga algo que decirles».

REORIENTACIÓN EN EL PPDEG

A la espera de los pasos que pueda dar Feijóo, en el PPdeG hay dos visiones acerca de cuál sería la nueva fecha electoral más propicia. Y es que, si bien a principios de esta semana prácticamente todas las voces veían de forma unánime que «no tocaba» hablar de unos comicios que «acaban de suspenderse», tras conocer la intención de Urkullu son muchas las impresiones que han cambiado.

Así, hay fuentes de la dirección de la formación popular que mantienen que es «muy precipitado» hablar de elecciones y argumentan que la situación no se habrá «normalizado completamente» hasta agosto. Opinan que el planteamiento de Urkullu es «equivocado», que tiene «unos motivos de apuro» de los que carece Feijóo y que éste no está todavía «con la cabeza» en los comicios gallegos.

«Hay margen para pensarlo, casi un mes, si se celebran a finales de julio», apuntan, sin embargo, otros dirigentes de la dirección del partido consultados por Europa Press. Estas fuentes sostienen que Feijóo tiene margen para «compaginar» su discurso de que «ahora mismo no piensa en los comicios» con su celebración en julio.

Internamente está extendida la visión de que la gestión de la crisis sanitaria le ha reforzado frente a un PSOE que sale «más debilitado». Desde una perspectiva electoral, entienden –frente a quienes consideran que sería difícil de explicar mantener algunas restricciones y que se celebren los comicios– que al PPdeG le beneficiaría, entonces, que se celebren «cuanto antes mejor».

También hay quien considera, dentro de la cúpula del PPdeG, que sería «muy difícil» justificar desmarcarse de Euskadi, porque se podría dar a entender que la situación gallega «es peor». «Y eso no es así», apuntan las mismas fuentes, que admiten que en julio sería «imposible» celebrar una campaña «normal».

«Pero tampoco a finales de septiembre o en octubre, y estaría ahí el posible rebrote», añaden. En todo caso, todas las fuentes consultadas remarcan que la decisión última será de Feijóo, quien, una vez más, escuchará a unos y a otros antes de trasladar cuándo acudirá Galicia a las urnas.