Agentes de la Policía Nacional han detenido en Motril (Granada) a un varón de 44 años de nacionalidad española como presunto autor de un atraco perpetrado alrededor de las 22,00 horas en un establecimiento situado comercial situado en dicha ciudad tras intimidar a la dependienta con un cuchillo de gran tamaño.
El robo se frustró gracias a la intervención de un testigo del mismo que retuvo al varón. Tras realizar una llamada al Cimacc-091, los policías lo arrestaron, devolvieron el dinero de la caja registradora a la empleada e intervinieron el arma utilizada, según ha detallado la Policía en un comunicado.
Así las cosas, sobre las 22,00 horas, se recibió una llamada en el Cimacc-091 en la que una persona informaba de un atraco en una tienda situada en Motril.
A su llegada, los agentes se encontraron con un testigo del suceso que tenía retenido al presunto atracador, por lo que se hicieron cargo de la actuación y lo detuvieron gracias a que fueron informados de que, momentos antes, se observó salir a la carrera a un hombre.
Ya dentro del inmueble, la dependienta, que se encontraba paralizada, trasladó la información a un testigo y este echó a correr, consiguiendo alcanzar al atracador.
En ese momento, el presunto autor de los hechos se giró e intimidó con el mismo cuchillo al testigo, iniciándose un forcejeo entre ambos que finalizó con el presunto atracador retenido.
Mientras tanto, se producía la llamada al teléfono de la Policía Nacional, quienes arrestaron al individuo y lo trasladaron a las dependencias de la comisaría de Motril. En el momento de la detención, el hombre manifestó a los agentes de manera espontánea que había sido él y que se trató de un error.
En el lugar del arresto, los agentes localizaron e intervinieron el arma utilizada, un cuchillo de gran tamaño, así como el dinero sustraído que se devolvió a la dependienta, quien necesitó ser atendida en un centro sanitario debido al impacto que le produjo el atraco.
La Policía ha resaltado la importancia de la colaboración ciudadana en la lucha contra la delincuencia, ya que una simple llamada de teléfono de la Policía Nacional –Cimacc-091– alerta a los agentes acerca del lugar y momento concretos de las actuaciones de los delincuentes y pueden dar una respuesta inmediata y más eficaz.
Una vez finalizado el atestado policial, los agentes se han remitido a la autoridad judicial en Motril informando de las actuaciones llevadas a cabo.