La cerveza sin alcohol lleva muchos años en el mercado pero, a pesar de su amplia variedad, hasta ahora no se ha conseguido un sabor auténtico. Las últimas investigaciones que expertos daneses han realizado les ha permitido lograr una cerveza más saludable pero con el mismo sabor original.
Esta bebida impregna todo el aroma y sabor de la clásica que le faltaba a la cerveza sin alcohol que se comercializa. Sotirios Kampranis, profesor de la Universidad de Copenhague, considera que el problema a que el sabor fuera acuoso y plano se debe a que «lo que le falta a la cerveza sin alcohol es el aroma del lúpulo». Este componente, es uno de los empleados en la elaboración de la cerveza que, aporta el característico amargor debido a los ácidos alfa que contiene.
Hasta el momento no se había conseguido mantener este ingrediente al extraer el alcohol de la cerveza, ya que se adhería, y por este motivo el sabor distaba tanto del original. «Cuando le quitas el alcohol a la cerveza, por ejemplo calentándola, también matas el aroma que proviene del lúpulo». Tras muchas investigaciones los daneses parece que han encontrado la forma de elaborar la cerveza sin alcohol conservando el lúpulo.
El método tradicional de elaborar una cerveza sin alcohol
Se pueden seguir distintos procesos para fabricar cerveza, sin embargo, en todos, el resultado es el mismo. No se había conseguido hasta el momento, ni recuperar ni mantener, el lúpulo del que carecía la cerveza sin alcohol. «Otros métodos para hacer cerveza sin alcohol minimizando la fermentación también conducen a un aroma deficiente porque se necesita alcohol para que el lúpulo transmita su sabor único a la cerveza»
La elaboración de la cerveza sin alcohol manteniendo el sabor original
Tras llevar a cabo diversas investigaciones se ha logrado obtener el mismo aroma y sabor de la cerveza normal en la sin alcohol. Esto ha sido posible ya que se ha modificado una de las fases del proceso de elaboración. La producción se realiza extrayendo las moléculas monoterpenoides, una vez que el alcohol ha sido liberado. Posteriormente se agregan de nuevo a la cerveza consiguiendo que recupere el sabor original. Explican que «cuando las moléculas de aroma del lúpulo se liberan de la levadura, las recolectamos y las ponemos en la cerveza, devolviendo el sabor de la cerveza normal que muchos conocemos y amamos».
Avances de la investigación
Los investigadores han conseguido convertir las células de levadura en micro partículas que pueden ser cultivadas en fermentadores liberando así el aroma del lúpulo que da el sabor a la cerveza. Al conseguir separar esta sustancia del alcohol, es posible añadirla después dando lugar a una cerveza sin alcohol con todo su sabor. La investigación ha sido publicada en Nature Biotechnology y el método se encuentra en una fase de prueba en cervecerías de Dinamarca.
Este proceso además es más sostenible que las técnicas de producción actualmente utilizadas. «Con nuestro método nos saltamos los lúpulos aromáticos por completo y, por lo tanto, también el agua y el transporte. Esto significa que se puede producir 1 kg de aroma de lúpulo con 10.000 veces menos de agua y 100 veces menos de CO2».
Beneficios derivados del proceso de fabricación
Con esta innovadora técnica han alcanzado dos grandes beneficios para la sociedad, contribuir en el cuidado del medio ambiente y en un estilo de vida más saludable, dando lugar a una cerveza sin alcohol que mantiene el sabor de la normal. Este proceso de produccion, que ha generado grandes expectativas en los consumidores, se espera que esté disponible en la industria en octubre de este año. La nueva producción de cerveza sin alcohol supondrá la revolución en las alternativas existentes hasta ahora.