jueves, 12 diciembre 2024

El 83% de los españoles hace «todo lo que puede» contra el cambio climático pero cree que los demás no

El 83 por ciento de los españoles cree hacer «todo lo que puede» para luchar contra el cambio climático en su vida cotidiana, pero la mayoría opina que sus compatriotas «no hacen lo mismo», según una encuesta del Banco Europeo de Inversiones que observa que casi tres cuartas partes de la población (74%) ya tiene en cuenta el cambio climático a la hora de votar.

Los datos forman parte de la segunda parte de la encuesta sobre el clima 2021-2022 del Banco Europeo de Inversiones que analiza el comportamiento individual de los ciudadanos y sus opiniones sobre el cambio climático.

Entre las principales conclusiones, la encuesta señala que «solo» el 22 por ciento de los españoles que compran automóviles optaría ahora por un coche de gasolina o diésel en su próxima compra de un vehículo, frente al 78 por ciento que afirma que comprará un coche híbrido o eléctrico.

Además, el 75 por ciento de los jóvenes españoles afirma tener en cuenta el cambio climático a la hora de elegir un destino para las vacaciones pero, al mismo tiempo la mayoría de ellos prevé viajar en avión el próximo verano. Asimismo, el 65 por ciento de los jóvenes españoles aseguran que tienen en cuenta el cambio climático al buscar trabajo y el 53 por ciento compra ropa de segunda mano en vez de nueva.

En definitiva, los resultados de la entidad financiera europea reflejan que los europeos prefieren los coches híbridos y eléctricos a los de gasolina o diesel y que los compradores españoles optarán por estos vehículos en el 78 por ciento de los casos. En concreto, el 44 por ciento compraría un vehículo híbrido y el 34 por ciento optaría por uno eléctrico.

Precisamente, los españoles compradores de automóviles mayores de 65 años están especialmente interesados en comprar un vehículo híbrido (el 49 por ciento de las personas mayores de 65 años elegirían un híbrido). Lo mismo ocurre con los jóvenes españoles (15-29 años), que consideran que un vehículo híbrido es la opción más favorable (40 por ciento), seguida de la elección de un coche eléctrico (35 por ciento) y la de un vehículo de gasolina o diésel (25 por ciento).

Solo una minoría de los españoles en general (11 por ciento) dice que no tiene vehículo ahora y que no piensa comprar uno.

Con estos datos, los españoles parecen estar más dispuestos a pasarse a las nuevas tecnologías del automóvil que los franceses (61%) y los alemanes (52%), pero en la misma medida que los italianos (78%).

Los españoles son los más inclinados por los vehículos híbridos, pues el 44 por ciento afirma que optará por esa opción en la próxima compra, siete puntos por debajo de la de los italianos, pero seis puntos por encima de la cifra de los franceses (38%) y 15 puntos por encima de los alemanes (29%).

Por otro lado, a los compradores de automóviles españoles, el 34 por ciento y de los italianos, 27 por ciento, les parecen más atractivos los coches eléctricos. Alemanes y franceses, con un 23 por ciento parecen tener «bastantes reservas» en cuanto a elegir ese tipo de coche en su próxima compra.

En términos globales, los compradores europeos de automóviles se inclinan por los vehículos híbridos (39%), mientras que los vehículos de gasolina o diésel ocupan el segundo lugar (33%) y los vehículos eléctricos ocupan el tercero (un 28% afirma que compraría un coche eléctrico). Mientras que los compradores chinos de automóviles son los que más se inclinan a comprar un coche eléctrico (44 %), los estadounidenses optarían primero por un vehículo híbrido (38 %), luego por un vehículo de gasolina o diésel (33 %), y en tercer lugar por un coche eléctrico (29 %).

VIAJAR EN AVIÓN

Aunque el 69 por ciento de los españoles dice tener en cuenta el cambio climático a la hora de elegir su destino para las vacaciones, esa preocupación aumente entre los menores de 30 años, ya que el 75 por ciento dice que tiene en cuenta el cambio climático al planificar sus vacaciones, frente al 67 por ciento de las personas de 30 a 64 años y el 68 por ciento de las personas de 65 años o más).

Pero la mayoría de los jóvenes (56 %, frente al 38 % de las personas de 30 a 64 años y el 33 % de las personas de 65 años o más) dice que utilizará el avión para sus vacaciones de verano en 2022.

Más de una cuarta parte de los jóvenes (27%, frente al 16% de las personas de 30 a 64 años y el 16% de las personas de 65 años o más) dice que viajará en avión a un destino lejano.

Las consideraciones climáticas influyen asimismo en la decisión de compra de los ciudadanos, ya que el 33 por ciento de los españoles afirma comprar ropa de segunda mano en lugar de ropa nueva (nueve puntos por debajo de la media europea). Las mujeres tienden más a hacerlo que los hombres (39% en el caso de las mujeres frente al 27% de los hombres).

Esta práctica es especialmente popular entre los jóvenes de 15 a 29 años (53 %), mientras que la cifra disminuye 39 puntos entre las personas mayores de 65 años (14 %).

A la hora de buscar trabajo, el cambio climático es tenido en cuenta por el 46 por ciento y especialmente entre las personas de 15 a 29 años, ya que en ese grupo, el 65 por ciento de los jóvenes tiene en cuenta el cambio climático en la búsqueda de empleo, frente al 47 por ciento de las personas de 30 a 64 años (18 puntos por debajo).

En general, el 49 por ciento de los españoles tiene en cuenta el cambio climático cuando elige su banco o invierte sus ahorros. Esta cifra es más alta entre los españoles que tienen de 15 a 29 años (el 55 %) y disminuye con la edad (el 49 % para las personas de 30 a 64 años y el 43 por ciento para las personas mayores de 65 años).

El vicepresidente del BEI, Ricardo Mourinho Félix ha destacado que a pesar de las «claras» diferencias generacionales, los españoles están cambiando cada vez más sus hábitos de consumo y su comportamiento en el sentido de hacerlos más responsables y sostenibles para hacer frente al cambio climático.

«Estos cambios en el comportamiento individual muestran que personas de todas las edades están dispuestas a asumir compromisos más firmes en su vida cotidiana para ayudar a mitigar la crisis climática. Estos propósitos se expresaron durante la COP26 y son un claro indicador del apoyo a nuestros esfuerzos por fomentar la transición ecológica», ha concluido.