La dirección nacional del PP está diseñando una campaña «pegada al terreno» para su líder, Pablo Casado, ante las elecciones autonómicas del 13 de febrero en Castilla y León, con el objetivo de contraponer su cercanía a la gente con la imagen de Pedro Sánchez, «que no pisa la calle» y «solo va en coche oficial y Falcon», han informado fuentes ‘populares’.
‘Génova’ está ultimando la agenda del presidente del PP, que recorrerá las nueve provincias con actos sectoriales y en contacto estrecho con los ciudadanos, «entrando en bares, tiendas u otros establecimientos» como, según recuerdan, hizo recientemente en Navas del Marqués, su pueblo de adopción para conocer los «problemas de la España real en su día a día». Además tendrá deferencia con Ávila –provincia por donde fue diputado ocho años– y Palencia, su lugar de nacimiento.
«Será una campaña en la calle y muy pegada al terreno. Frente a un Pedro Sánchez que solo usa el Falcon y el coche oficial, que no pisa la calle, se verá a un Pablo Casado con el ganadero, el agricultor, el autónomo o el pequeño empresario», aseguran las fuentes consultadas.
En ‘Génova’ hacen hincapié en que Casado «puede pisar la calle pero Sánchez no puede» y, de hecho, recuerdan en los «abucheos» que recibió el presidente del Gobierno hace dos semanas en Palencia a raíz de la polémica sobre la carne de las macrogranjas generada tras las declaraciones del ministro Alberto Garzón.
AYUSO, FEIJÓO Y MORENO YA TIENEN CONFIRMADOS ACTOS
Aparte de Casado, también la mayoría de los ‘barones’ territoriales del partido se desplazará a Castilla y León para arropar individualmente a su candidato, Alfonso Fernández Mañueco, en actos de campaña. Por lo pronto, ya está confirmada la presencia de la madrileña Isabel Díaz Ayuso, el gallego Alberto Núñez Feijóo y el andaluz Juanma Moreno, han señalado las fuentes consultadas.
Los ‘populares’ afrontan con optimismo estas elecciones porque los datos internos que manejan les sitúan «rozando la mayoría absoluta» y sumando «más votos que toda la izquierda junta», dado que el PSOE «no se ha recuperado de la crisis de la carne». Por eso, los ‘populares’ estirarán este asunto en campaña y programarán actos centrados en la agricultura y la ganadería.
Si se cumplen sus datos demoscópicos, Mañueco podrá hacer realidad su aspiración de gobernar en solitario, un mensaje que repite continuamente en sus intervenciones y en respuesta a Vox, que ya ha dicho que no le dará «gratis» sus votos.
UNAS ELECCIONES CON PROYECCIÓN NACIONAL
En ‘Génova’ son conscientes de que estos comicios tienen proyección nacional y que una holgada victoria de Mañueco ayudará a Casado a apuntalar y consolidar su liderazgo interno, así como su imagen de alternativa al PSOE de Pedro Sánchez.
Por eso, en la cúpula del PP admiten que «no son unas elecciones más». «España se juega consolidar el cambio de tendencia que ya comenzamos hace unos meses y consolidar para siempre el cambio político en España», afirmó hace una semana la mano derecha de Casado, Teodoro García Egea.
Mientras tanto, en Andalucía miran con atención lo que ocurra en Castilla y León, cuyo resultado podría servir de revulsivo a todo el partido. Por lo pronto, Juanma Moreno ya ha lanzado la advertencia de que adelantará las elecciones si a partir de febrero, cuando se reanudan las sesiones en el Parlamento andaluz, hay «bloqueo» a la acción de gobierno.
ANTE LA ESPAÑA VACIADA: «EL PP, PARTIDO DE LA TIERRA»
El PP también quiere contrarrestar la irrupción de la España vaciada en la campaña de Castilla y León, y subrayará el mensaje de que son es el «partido del territorio y de los pequeños municipios». «Somos el partido de la tierra, del campo y del mundo rural», señalan las mismas fuentes.
En este contexto, y después de algunas polémicas de legislatura, los ‘populares’ se han comprometido a hacer una ley que garantice la asistencia sanitaria en el mundo rural y aseguran que si gana el PP habrá más recursos humanos y mejor transporte sanitario de emergencias en todo el territorio. También presumen de que el PP prometió que los consultorios no se cerrarían y han cumplido, según añaden.
El PP no quiere dar alas a Vox –algunas encuestas pronostican que podría pasar de un procurador a una decena– y evitará entrar en el cuerpo a cuerpo si hay provocaciones de Vox, salvo que se produzca un «ataque virulento», precisan las fuentes consultadas. «Nosotros, a lo nuestro», es la consiga general que Casado ha dado a los suyos.
Los ‘populares’ quieren mantener el rumbo y no alterar sus ejes de campaña porque, según recalcan, las encuestas recogen que el partido «va muy bien» y está «calando la unificación del voto» con el mensaje de que es mejor un gobierno en solitario de Mañueco para poder aplicar su programa electoral.