La Junta Electoral Central (JEC) ha respaldado la exclusión de Vox de los debates que puedan organizarse en Castilla y León con motivo de las elecciones autonómicas del próximo 13 de febrero, ya que no cuenta con grupo parlamentario propio en las Cortes y por tanto no cumple el requisito que establece la ley electoral de esta comunidad. Eso sí, admite que su ausencia debe ser compensada con alguna medida de tratamiento informativo.
Con esta decisión, dada a conocer este viernes y que ha contado con un voto particular, el máximo órgano arbitral da la razón a la Junta Electoral de Castilla y León, cuyas resoluciones de 10 y 14 de enero de 2022 habían sido recurridas por Vox.
En la resolución, La JEC recuerda que la Ley Electoral de Castilla y León prevé la celebración de debates públicos durante la campaña «entre candidatos a la presidencia de la Junta de Castilla y León de las formaciones políticas que tengan grupo parlamentario propio», y Vox tiene representación pero no alcanza a grupo parlamentario propio.
Esa condición, estima la JEC, no vulnera el pluralismo político porque se trata de «es un criterio objetivo e imparcial». Y, además, entiende que «la proporcionalidad está suficientemente garantizada» porque la Junta Electoral autonómica ya prevé que los candidatos de las formaciones sin grupo parlamentario propio, como Vox y también Unidas Podemos, puedan ser objeto de «información compensatoria suficiente».
Eso si, esa compensación no ped ser fijada por las juntas electorales, sino que será propuesta por los medios de comunicación que organicen los debates y, en su caso, su decisión podrá ser impugnada ante el organismo arbitral, que resolverá según se trate de un medio de titularidad pública o de titularidad privada.
El acuerdo de la JEC es firma por la vía administrativa y ya sólo cabe la interposición de recurso contencioso-administrativo ante la Sala Tercera del Tribunal Supremo en el plazo de dos meses desde su notificación.
La decisión ha contado con un voto particular concurrente por parte de José Miguel Serrano, el vocal que fue propuesto por Vox para al JEC, que entiende que la ley electoral de Castilla y León es excesivamente «minuciosa» y que el partido de Santiago Abascal merecería que se estableciese un tratamiento compensatorio acorde con el hecho de que se presenta en todas las provincias y que, en las últimas generales, sumó seis diputados en esa comunidad.