El cuadro «Dieciséis cabezas caricaturescas y Autorretrato de Goya» no ha encontrado comprador en la subasta que la casa Ansorena ha celebrado este jueves con un precio de salida de 800.000 euros.
La monografía pintada con pluma sepia y lápiz negro sobre papel verjurado (30 x 41 centímetros) pertenece a una colección particular y no ha encontrado un nuevo dueño ya que en la subasta no se ha llegado al precio de salida.
En cuanto a su procedencia, probablemente fue regalado o vendido por Goya a Mariana Wallenstein (o Marie-Anne de Waldstein), esposa del IX Marqués de Santa Cruz, José de Silva y Bazán. Después de la muerte de la marquesa la heredó la condesa consorte de Scláfani.
Más tarde, fue heredado o adquirido por Fernando Sánchez de Toca y Muñoz, II duque de Visa-Alegre y II marqués de Somio. Después lo compraría Antonio Moreno Martín (Librería Granata, Almería), en 1963, junto con el resto de su colección de dibujos, estampas y biblioteca.
El dibujo de las dieciséis cabezas caricaturescas fue dado a conocer por primera vez en 1922 en la «Exposición de Dibujos originales. 1750 a 1860» realizada en el Palacio de Sestago en Zaragoza.
Realizados en un papel de escribir verjurado con filigrana, dividido en dos mitades, la mayoría de los rostros caricaturescos que Goya dibujó son masculinos, intentando captar los caracteres de los personajes que atendían a la tertulia, con un tono jocoso, pero a la vez con un sentido crítico sobre sus personalidades.
Se trata de una obra importante del artista, reflejo de su espíritu creador, ejecutado de forma rápida y libre, con un sentido crítico y marcado por sus circunstancias personales, su enfermedad, que habría cambiado la forma de verse a sí mismo y relacionarse en la sociedad de su época.