El PSOE y los partidos del centro y la derecha han protagonizado este miércoles en el Pleno del Congreso un tenso debate a cuenta del presupuesto para la futura Ley de Memoria Democrática, en el que PP, Vox y Ciudadanos han acusado al Ejecutivo de «cuestionar» e incluso querer «borrar» la Transición y también los crímenes de ETA, y el diputado socialista Odón Elorza les ha respondido asegurando que son «golpistas de vocación».
«Ya está bien. Dejen de utilizar a las víctimas del terrorismo, que son de todos, para atacar al Gobierno de izquierdas. Dejen de utilizar a las víctimas para denigrar un Presupuesto. No sean tan miserables, y dejen ya en paz el terrorismo de ETA. ETA desapareció, ETA no está aquí, aquí no hay terroristas. Ya está bien. Aquí lo que hay es franquistas, unas derechas de vocación golpista», ha sentenciado el socialista vasco.
La intervención de Elorza, que ha sido aclamada por el resto de diputados socialistas, se ha producido durante el debate en el Congreso de la sección de los Presupuestos Generales del Estado para 2022 relativa al Ministerio de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, que previamente ha defendido en el Pleno el ministro Félix Bolaños.
Tras la exposición del ministro, los representantes de Ciudadanos, PP, Vox y UPN han aprovechado sus turnos para criticar esa futura ley de memoria democrática que servirá para canalizar el presupuesto en esta materia; y todos ellos han acusado al Gobierno de querer revisar la Transición y, también, de «olvidarse» en esa revisión de las víctimas de ETA, por su interés de sumar los apoyos a sus cuentas de EH Bildu.
«¿NO ALCANZÓ EL PSOE EL PODER DE FORMA DEMOCRÁTICA EN EL 82?»
Según el diputado de Ciudadanos, Guillermo Díaz, el Gobierno pretende «reescribir» una historia en la que «ETA no existió» –para poder «pactar con Otegi tranquilamente»–, y en la que «Franco murió ayer», en relación a la comisión de expertos que se creará para investigar posibles violaciones de derechos por «inercias del franquismo» después de la aprobación de la Constitución, hasta el año 1982.
«¿No alcanzó el PSOE el poder de forma democrática en el 82? ¿En qué régimen se produjo esa victoria del PSOE? ¿Son capaces de robar a Felipe González una victoria que ni olerán con tal de poner todo el pasado a su servicio?», se ha preguntado el diputado ‘naranja’.
La diputada del PP Edurne Uriarte también se ha mostrado muy crítica con el Gobierno y con la «ley de memoria sectaria», y ha acusado al Ejecutivo de echarse «en brazos de la ultraizquierda» para firmar enmiendas con las que «no solo cuestionan la ley de amnistía sino toda la Transición».
También se ha referido a este límite temporal de año 82 para investigar posibles crímenes relacionados con el franquismo, y ha denunciado que es «tremendo» porque al decir que se piensa «en los golpistas del 81» demuestra, a su juicio, que «no se piensa en los asesinatos de ETA».
«Cómo van a pensar en los crímenes de ETA sino acaba de pactar estos Presupuestos con quienes fueron el brazo político de ETA y siguen sin condenar a ETA», ha apostillado la diputada del PP.
Por su parte, el diputado de Vox Francisco Contreras también ha acusado al Gobierno de estar «destruyendo el espíritu de la Transición». «El PSOE actual se está podemizando y asumiendo la visión de la historia de Podemos según la cual la Transición fue la continuación del franquismo por otros medios», ha denunciado.
ODÓN ELORZA: «YA ESTÁ BIEN»
Después de escuchar todas estas críticas, el socialista Elorza ha protagonizando una encendida intervención, reprochando el uso de las víctimas de ETA por parte de la derecha y, en concreto, del diputado de Ciudadanos Guillermo Díaz, por asegurar que el PSOE quería borrar de la historia a la banda terrorista y a sus víctimas, incluidas, las socialistas.
Tras recordar que varias de las víctimas nombradas por Díaz eran amigos suyos, como Enrique Múgica o Ernest Lluch, y cómo estuvo con ellos hasta el final, ha sentenciado que «ya está bien», y ha cargado duramente contra «las derechas con vocación golpista», comparándolas con la de Brasil o el expresidente estadounidense Donald Trump.
También ha aprovechado para denunciar la participación del líder del PP, Pablo Casado, en una misa en la que se rezó por Franco el pasado sábado 20 de noviembre. En concreto, se ha preguntado «dónde está Wally Casado», si seguiría en esa «misa de recuerdo del dictador» o en Génova «leyendo ‘El Príncipe destronado’ y mirando de reojo» a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
«Ustedes son golpistas de vocación», ha sentenciado, cosechando los aplausos de la bancada socialista, con los diputados puestos en pie, mientras los del PP y de Vox protestaban airadamente.
RECADO A BOLAÑOS
Elorza también ha usado su turno para hacerle un ‘encargo’ al ministro Bolaños, y pedirle que «impulse y perfeccione la rendición de cuentas, la transparencia, la regeneración democrática, la memoria democrática. «Cuestiones importantes para avanzar y fortalecer la democracia», ha asegurado el diputado que reconoció que había roto la disciplina de voto para no apoyar al candidato al TC Enrique Arnaldo –propuesto por el PP–, en contra del criterio del PSOE y el Gobierno.
El debate del presupuesto para el Ministerio de Presidencia ha comenzado con la intervención de Bolaños, quien ha expuesto y defendido las diferentes partidas de su departamento, pero sobre todo ha hecho hincapié en la necesidad de que las cuentas públicas en su conjunto salgan adelante para afianzar una «recuperación justa».
«Son unos Presupuestos históricos», ha reivindicado el ministro, antes de desgranar sus cifras y defender, por ejemplo, que el 60% de la partida destinada a memoria democrática servirá para «localizar, identificar y dar sepultura digna a personas víctimas de la guerra civil o la dictadura». «Es una política humanitaria», ha defendido.
También ha explicado otras partidas, como las destinadas a apoyar la Jefatura del Estado o la Presidencia del Gobierno, y a organismos públicos como el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que después han recibido también las críticas de la oposición.
Según la representante del PP, se está sufragando un organismo que hace encuestas que ahora «tienen como objetivo perjudicar al principal partido de la oposición y a su líder». También ha denunciado que la partida para dar apoyo a la actividad del presidente Pedro Sánchez es «propaganda». «Propaganda de Sánchez, manipulación de encuestas con dinero público y ley de memoria sectaria. Eso es lo que quieren que paguemos todos los españoles», ha sentenciado Uriarte.