La doctora María Neira, directora de Salud Pública y Medio Ambiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha destacado que una de las enseñanzas más importantes de la pandemia de Covid-19 de cara al futuro es la necesidad de poner en valor el concepto ‘One Health’, esto es, la interrelación entre salud humana, salud animal y salud ambiental. «La mitigación del cambio climático es la mitigación de muchas fuentes de transmisión de virus», ha destacado.
Así se ha expresado la experta en la clausura del World Pandemics Forum, que se ha celebrado durante este viernes y este sábado en Ifema Madrid con el objetivo de debatir sobre la preparación ante futuras pandemias, y con la participación de la comunidad científica, representantes de salud pública, de la epidemiología, la investigación, la vacunología, y de altos cargos de la industria empresarial y farmacéutica.
«Una perspectiva o visión global nunca ha sido tan fundamental. La salud ambiental nos protegerá no solo de los virus, sino que, al permitirnos ir a las causas de estos, se generará una salud más amplia, que contribuirá a reducir muchos otros riesgos, además de los propios virus y bacterias», ha expresado Neira.
En este sentido, la experta ha facilitado una serie de prescripciones, en nombre de la OMS, «para una recuperación saludable, verde y justa, y para estar mejor preparados para responder mejor a un virus, para ir a la fuente de lo que nos puede hace mas frágiles como sociedad», ha descrito.
Así, la primera indicación es que, en momentos donde los países se están recuperando económicamente, es necesario que se haga una inversión «pensando en la ciencia y en la prevención en salud. Una de esas inversiones en salud, ha proseguido Neira, «tiene que ser protegiendo la cobertura sanitaria universal», ya que, tal y como ha recordado, «muchos países aún no la tienen».
Además, esta «recuperación verde» tiene que pasar «por ir a las fuentes de qué es lo que está pasando, pensando siempre en la interacción humana y en la salud animal», según Neira. Así, ha insistido en la importancia de establecer una vigilancia epidemiológica más sofisticada, pero «viendo también cuáles son las causas que han provocado la ruptura entre la especie humana y la especie animal». Estas causas, ha proseguido, «pasan por la destrucción de los ecosistemas».
«Esa lucha absurda entre los seres humanos y la naturaleza tiene que acabar. La deforestación es lo que ha hecho que los animales encuentren una puerta de entrada para entrar en contacto con humanos. Además, el calentamiento global también ha favorecido la proliferación de enfermedades transmitidas por vectores, como es el caso de la malaria», ha lamentado Neira.
LAS CIUDADES CONTAMINADAS, EL MEJOR ESCENARIO PARA PROPAGAR EL VIRUS
Por otro lado, ha destacado el papel de las ciudades en la lucha contra futuras pandemias. «Las políticas urbanísticas que tenemos ahora no responden a las necesidades de los humanos, sino a las de los coches», ha advertido, añadiendo que las ciudades contaminadas que, además, sobrepasan los 10 millones de habitantes, son «el mejor escenario para la propagación de los virus».
Así, la doctora sostiene que la solución reside en «redimensionar las ciudades», y que estas se marquen como objetivo que sus ciudadanos puedan «respirar un aire mas limpio, sin tantos coches». Precisamente en relación con esto, la directora de Salud Pública y Medio Ambiente de la OMS ha señalado otro problema, la energía y la quema de combustibles fósiles.
«Si seguimos quemando combustibles fósiles, vamos a seguir contaminando aire, y ese aire termina en nuestros pulmones», ha recordado la experta de la OMS, para añadir que esa polución hace que, en las ciudades, esos pulmones sean mas vulnerables a los virus trasmitidos por vías respiratorias. «Esto provoca un desarrollo de formas severas de las enfermedades respiratorias, precisamente porque los pulmones están afectados», ha razonado la directora general de Salud Pública de la OMS.
Por eso, para la experta, luchar contra las causas del calentamiento global «puede tener enormes beneficios para la salud» y, a su vez, «en la economía». Al respecto, ha recordado los altos costes hospitalarios de las enfermedades provocadas por la exposición a la contaminación provocada por los combustibles fósiles.
En este mismo sentido se ha expresado el presidente de la Asociación Española de Vacunología y jefe de Epidemiología del Servicio Canario de Salud, Amós García. «Hay que empezar a reflexionar sobre la importancia del concepto ‘One Health’, es decir, sobre el equilibrio entre las 3 saludes (animal, ambiental y humana) para trabajar en contra del desarrollo de estas pandemias», ha apostillado.
«Estamos en un momento que tiene que ser un punto de inflexión fundamental, que nos invite a avanzar, y para ello tenemos que entender que las cuestiones como el calentamiento global son claves para el desarrollo futuro. Esta pandemia tiene que ser el principio del cambio», ha subrayado.
ENJUANES, SOBRE SU VACUNA: «TARDAREMOS UN POCO EN LLEGAR AL FINAL»
Por otro lado, el doctor Luis Enjuanes, virólogo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y director del Laboratorio de Coronavirus del Centro Nacional de Biotecnología, ha recordado, al respecto de la vacuna intranasal contra la Covid-19 que está desarrollando en su laboratorio, que todavía se encuentra en fase de investigación. «Nosotros tardaremos un poco en llegar al final», ha destacado.
Así, ha hecho hincapié en las ventajas de su vacuna en comparación con las que se están inoculando a día de hoy. «Ahora mismo, ninguna es perfecta. Nosotros, no obstante, con la experiencia que teníamos, hemos hecho un candidato que puede tener grandes ventajas: expresa no una proteína, sino 3, amplifica la dosis del antígeno y, al ser intranasal, es súper eficaz», ha abundado el investigador del CSIC.
Sin embargo, ha recordado, el procedimiento «no es fácil» porque «las agencias reguladoras son muy exigentes y cuidadosas». «Siempre les preocupa que, con la administración intranasal, se pueda cruzar la barrera hematoencefálica», ha explicado.
Así las cosas, ha comentado que las versiones intramusculares de la vacuna, es decir, las que se administran actualmente, funcionan, «pero todavía hay que mejorarlas». «Requieren dos dosis y, a pesar de eso todavía te puedes infectar, amplificar el virus y transmitirlo a otra persona», ha argumentado. Con todo, ha expresado un mensaje de tranquilidad, ya que, en caso de infección tras la vacuna, «la patología que causa el virus es muy suave».