El líder de Unidas Podemos ha impuesto un estilo político con poco diálogo. Pablo Iglesias está empeñado en llevar adelante la renta básica, incluso ha creado una versión temporal para empezar con el sistema cuanto antes. Tras prohibir el despido y coquetear con el control de precios del material sanitario, el vicepresidente del Gobierno quiere pagar 500 euros al mes a los españoles más vulnerables ante la crisis, sin embargo, aunque Iglesias ha confirmado que ha pactado la forma de aplicarlo con los sindicatos, las empresas y la patronal, la CEOE y Cepyme han acusado a Iglesias de mentiroso por asegurar que les ha tenido en cuenta.
Toda la política económica la está manejando Iglesias. El vicepresidente se ha convertido en una pieza fundamental del engranaje del Gobierno y es el líder de Unidas Podemos quien está imponiendo normas que no gustan en los sectores liberales y moderados del PSOE. Tanto es así, que su forma de actuar ha llevado a su principal rival y contrapeso en el Ejecutivo, la otra vicepresidenta Nadia Calviño, a amenazar con dimitir. Pero parece que se ha impuesto el estilo bolivariano para paliar las consecuencias de una crisis que aún se desconoce las dimensiones a las que llegará.
La renta básica es la medida estrella de Podemos. Fueron ellos quienes entraron en el panorama político con lo que entonces era considerado un delirio por los liberales. Y ahora, aprovechando la crisis y la coyuntura tan inestable del panorama sociopolítico español parece que se podrá llevar adelante, al menos en los sectores más vulnerables. Pero Iglesias lo quiere imponer sin establecer consenso ni acuerdo con quienes más se oponen a esta medida: la CEOE y Cepyme, quienes ya han mandado una nota conjunta contra las intenciones de Iglesias.
Ante la posibilidad de que el Gobierno apruebe próximamente un nuevo ingreso mínimo vital, desde CEOE y Cepyme queremos aclarar que, al tiempo que compartimos que ningún ciudadano puede quedar desatendido en esta crisis económica sobrevenida por la pandemia del Covid-19, en ningún momento se nos ha hecho partícipes de la negociación de tal iniciativa, ni se ha sometido a su discusión en el diálogo social, tal y como ha trascendido en medios de comunicación y redes sociales”, han detallado.
Es cierto que dentro del Gobierno hay quien se resiste a aplicar la renta básica de Iglesias, por eso el vicepresidente social se ha lanzado a ofrecer una vía temporal, como una demo o un periodo de prueba en el que se vea cómo funciona y cómo repercute en la economía. Y si los números le dan la razón a Podemos, aplicarla de forma definitiva en el marco de la Constitución (siempre que cuente con el apoyo necesario. Se trata de «un Ingreso Mínimo Vital Puente que permanezca vigente hasta la aprobación del Ingreso Mínimo Vital definitivo”, según las propias palabras del vicepresidente social del Gobierno Pablo Iglesias.
Mientras Iglesias habla de gastar y endeudarse más, el FMI y otros organismos liberales internacionales dan por hecho que la recesión que sufrirá España dará un duro golpe al PIB con un descenso de hasta el 20%. Algunos, los más alarmistas, prevén que la crisis será incluso peor que la del 2008. Pero todo está por ver, ya que el país sigue inmerso en la crisis sanitaria y aún ni siquiera prevé cuándo levantará el confinamiento.
Desde la CEOE y Cepyme consideran que las medidas de Iglesias no ayudarán precisamente a la recuperación. El líder de Unidas Podemos ya ha impulsado algunas normas que suponen un duro golpe para los empresarios, como la prohibición del despido y el límite de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) al estado de alarma. Sin embargo, la renta básica será la puntilla que acabe por entorpecer la recuperación, según estos colectivos, ya que ni siquiera está pactada, sino que parece una mera medida de efecto impregnada de electoralismo.