La Dirección General de Tráfico sigue obsesionada con proteger a los ciclistas. Lejos de crear carriles bici o de fomentar una convivencia segura para conductores y ciclistas, la nueva norma ha sido recibida con cierta polémica entre algunos grupos porque añade riesgos innecesarios. La DGT quiere que invadas totalmente el carril contrario para adelantar a un ciclista en caso de que cuente con más de un carril por el sentido contrario. Su director, Pere Navarro, sigue obsesionado con reducir las muertes en la carretera y poco le importa, al parecer, lo mucho que se entorpezca la circulación. Para Navarro, es necesario aumentar la protección de los ciclistas que circulan por carretera y prefiere que un coche invada «por completo» el carril en sentido contrario a que se pase a 1,5 metros de un ciclista. Esta normativa que pretende aprobar pronto la Dirección General de Tráfico viene acompañada de la polémica insistencia de Navarro porque en los adelantamientos no se pueda superar bajo ningún concepto el límite de velocidad de la vía.
«El conductor de un vehículo que pretenda realizar un adelantamiento a un ciclo o ciclomotor, o conjunto de ellos, debe realizarlo ocupando parte o la totalidad del carril contiguo o contrario, en su caso, de la calzada y guardando una anchura de seguridad de, al menos, 1,5 metros, salvo cuando la calzada cuente con más de un carril por sentido, en cuyo caso será obligatorio el cambio completo de carril. Queda prohibido adelantar poniendo en peligro o entorpeciendo a ciclistas que circulen en sentido contrario, incluso si estos ciclistas circulan por el arcén», dice la norma que pretende aprobar la DGT lo antes posible. El invadir !por completo» el carril en circulación contraria puede ser un peligro importante, especialmente en zonas de poca visibilidad.
La idea de la DGT era imponer que para adelantar a una bicicleta el coche tuviera la obligación de detenerse y circular a la misma velocidad del ciclista
Pere Navarro tiene una obsesión que es reducir al mínimo las muertes en carretera. Lo que para hacerlo no tiene problema en ralentizar el tráfico todo lo que sea necesario. Esta nueva normativa que afecta al adelantamiento de bicicletas no es nueva. Pere tenía intención de intervenir el código de circulación desde hacía tiempo en materia de adelantamiento a ciclistas. La idea de la DGT era imponer que para adelantar a una bicicleta el coche tuviera la obligación de detenerse y circular a la misma velocidad del ciclista. Sin embargo, esta medida parece que se quedó en el tintero en beneficio de esta segunda que obliga al vehículo a invadir por completo el carril contrario para adelantar en caso de que hay más de un carril en un solo sentido.
Tráfico solo quiere ralentizar la circulación o directamente premiar a los vehículos que vayan más despacio. Para Navarro, una autobahn alemana es un auténtico sinsentido porque se permite circular sin límite de velocidad. Estamos hablando del director de Tráfico que apostó por reducir la velocidad máxima de las autopistas y autovías de 120 kilómetros por hora a 110. Lo de los ciclistas directamente es aumentar la distancia a la par que se añade peligrosidad a las maniobras por la necesidad de invadir por completo el carril contrario, aunque no en caso de que solo haya un único carril en cada sentido.
La nueva norma que la Dirección General de Tráfico pretende llevar adelante en los próximos días ha sido aprobada a propuesta del Grupo Parlamentario Socialista y del Grupo Parlamentario Confederal de Unidas Podemos, En Comú Podem y Galicia en Común; vamos, del Gobierno de coalición, que presentaron en conjunto una enmienda para modificar el apartado 4 del artículo 35 con el objetivo de «reforzar la seguridad de los ciclistas y usuarios de ciclomotores cuando son adelantados». Por supuesto, tras esta medida está las recomendaciones de un Pere Navarro que lleva preocupado con las maniobras para adelantar ciclistas durante más de un año. Los partidos de la moción de censura han dado su apoyo también a la medida del PSOE.
Hasta ahora, la DGT recomendaba que era posible invadir el carril contrario por completo para realizar una maniobra de adelantamiento a un ciclista. Esto debió poner en la pista a más de uno, dado que ahora directamente será obligatorio en caso de que sean carriles con más de un carril de circulación. Las asociaciones de ciclistas reciben con alegría esta medida dado que siempre se han quejado del riesgo que supone circular con la bicicleta por la carretera. Y si ya Navarro les permite circular en pelotón siempre que quieran, mejor que mejor.