El órgano ejecutivo del Consejo Europeo de Investigación (ERC, por sus siglas en inglés) ha señalado este miércoles que promovió la salida del recién dimitido Mauro Ferrari a finales de marzo, tras la falta de compromiso mostrada por el investigador italiano con la institución desde accedió en enero al cargo de presidente.
Según desvela el comunicado del Consejo Científico, la dimisión del jefe del organismo de investigación europeo se debe a una moción de censura por escrito planteada el pasado 27 de marzo, después de que los 19 miembros que forman el Consejo Científico del ERC exigieran su marcha.
Contesta así a la versión de Ferrari de que decidió su marcha después de el Consejo Científico no apoyara su petición para que el ERC financiara una iniciativa especial enfocada en el coronavirus. «No apoyamos esta iniciativa porque no es nuestra misión. La Comisión de Investigación y la Dirección General de Innovación, con los que trabajamos en conexión, ya estaban muy activas en el desarrollo de nuevos programas para apoyar esta investigación a través de los canales apropiados», alega el comunicado.
El órgano ejecutivo del ERC ha indicado que se llegó a la situación de pedir su dimisión debido a la «falta de aprecio» mostrada por Ferrari hacia «la razón de ser» del ERC de apoyar el Programa Horizon de investigación e innovación de la UE, considerado el más ambicioso hasta el momento. «A pesar de sus pronunciamientos públicos, sus propuestas en el Consejo Científico no reflejaban esta posición. No entendía el papel del ERC dentro del Programa Horizon», ha señalado el texto.
Igualmente, los miembros del Consejo Científico critican la supuesta dejación de funciones del profesor italiano, de quien dicen que mostró una falta de compromiso con el organismo europeo, se ausentó de importantes reuniones y pasó largo tiempo en Estados Unidos, por lo que no defendía bien el programa y misiones del ERC cuando representaba a la institución.
Según su versión, Ferrari planteó varias iniciativas personales a la Comisión Europea, sin consultarlas con el Consejo Científico, usando su posición para llevar adelante sus propias ideas. También afean que en las últimas semanas, el profesor italiano estaba inmerso en distintas actividades externas, tanto académicas como comerciales, lo que restó tiempo y esfuerzo a su compromiso con el ERC. «La carga de trabajo asociada a estas actividades se demostró incompatible con el mandato como presidente del Consejo Científico», resume el comunicado.
RESPUESTA AL CORONAVIRUS
En una carta publicada este miércoles, el hasta ahora director del ERC alegaba que su marcha respondía a que no había logrado persuadir a Bruselas de establecer un programa científico a gran escala para luchar contra el nuevo coronavirus.
Fundamentaba su salida en que está «decepcionado» con la respuesta europea a la crisis sanitaria del coronavirus. «Llegué al ERC siendo un ferviente defensor de la UE, pero la crisis del COVID-19 cambió por completo mis puntos de vista», ha afirmado.
Creado en 2007 para financiar a los mejores científicos de Europa, el ERC se ha convertido en una de las agencias de financiación más prestigiosas del mundo con un presupuesto de alrededor de 2.000 millones de euros al año.