La casadiella dulce de Aragón es uno de esos placeres tradicionales que encanta a todos los que la prueban. Aunque el postre es más conocido en Asturias, Aragón tiene su propia versión, con un relleno generoso y un hojaldre crujiente que captura toda la esencia de la repostería casera. Es un dulce relleno de nueces, azúcar y un toque de anís o licor, envuelto en una masa frita u horneada que los convierte en verdaderos tesoros culinarios.
La mejor noticia de todas es que no necesitas viajar a Aragón para disfrutar de una buena casadiella dulce. Con ingredientes sencillos, fáciles de conseguir y un poco de tiempo en la cocina, puedes hacer este dulce en casa y disfrutar de él en cualquier momento del año. Ya sea como una sorpresa para saborear durante un té, para acompañar un café o simplemente para darte un gusto, la casadiella dulce se ajusta bien a los cánones sobre el sabor de quien aprecia la tradición en la mesa.
1Ingredientes para la casadiella dulce de Aragón

Para hacer la casadiella dulce al estilo aragonés necesitas ingredientes simples pero muy sabrosos, como harina, manteca o mantequilla, vino blanco o anís, azúcar y una pizca de sal para la masa. El relleno tradicional consta de nueces molidas o almendras combinadas con azúcar y un toque de anís dulce o licor similar que le da esa nota aromática característica.
Lo más esencial a tener en cuenta al seleccionar tus ingredientes es optar por nueces de alta calidad, ya que son las protagonistas del relleno. Si prefieres, también puedes hornear las casadiellas en lugar de freírlas y seguirán siendo un capricho irresistible con la mitad de culpa. La clave es respetar el equilibrio entre un hojaldre crujiente y un centro jugoso y fragante.