No hay nada como un buen plato de guisantes estofados para calentarte cuando las temperaturas comienzan a bajar y el cuerpo empieza a desear platos reconfortantes. Es una receta tradicional, simple pero sabrosa, que se ha transmitido de generación en generación, un clásico de la cocina casera. Su consistencia, deliciosa salsa y la opción de agregar diferentes ingredientes lo convierten en un plato perfecto para los días fríos.
Los guisantes guisados no sólo son un plato exquisito y nutritivo, sino también muy versátil. Se pueden preparar con o sin carne, agregar otras verduras e incluso adaptarse a dietas vegetarianas. La clave está en darle al ragú el tiempo de cocción necesario para que los sabores se mezclen, creando un deleite al paladar que requiere poco más que un buen pedazo de pan a su lado.
2Preparación de unos exquisitos guisantes estofados

La receta de los guisantes estofados comienza con un sólido sofrito. En una cacerola con aceite de oliva, se suavizan la cebolla, el ajo y el pimiento rojo. Luego se agregan la zanahoria en rodajas, el chorizo o jamón si lo estás usando, y una pizca de pimentón. Después, se agrega un poco de vino blanco y se reduce, lo cual también realza el aroma del plato.
Una vez ya esté casi listo el sofrito, se procede a agregar los guisantes, la patata en cubos y el caldo caliente para cubrir. Debes dejar cocinar todo a fuego medio durante 25 a 30 minutos aproximadamente, hasta que las verduras estén cocidas y el caldo se haya reducido, creando una salsa espesa y deliciosa. Por último, revisa la sal y sirve los guisantes estofados para disfrutar bien calientes.