El problema de ciberseguridad doméstica sigue creciendo mientras muchos usuarios permanecen ajenos a amenazas que tienen literalmente al lado. El router que utilizamos a diario para conectarnos a internet esconde un fallo de seguridad preocupante que pocos conocen pero que podría estar exponiendo toda nuestra actividad digital a terceros sin nuestro consentimiento. La configuración predeterminada con la que llegan estos dispositivos a nuestros hogares suele priorizar la comodidad sobre la seguridad, dejando abiertas puertas traseras que cualquiera con conocimientos básicos podría aprovechar.
La tecnología WPS (Wi-Fi Protected Setup) presente en prácticamente todos los routers modernos fue diseñada inicialmente para simplificar la conexión de dispositivos a la red. Sin embargo, esta funcionalidad se ha convertido en un verdadero caballo de Troya dentro de nuestros propios hogares, permitiendo que vecinos o cualquier persona cercana pueda interceptar nuestras comunicaciones o acceder a nuestra red privada mediante ataques informáticos relativamente sencillos. Los fabricantes conocen estas vulnerabilidades desde hace años, pero la situación apenas ha mejorado y millones de hogares españoles continúan expuestos a este riesgo mientras navegan con una falsa sensación de seguridad.
5CÓMO PROTEGER TU ROUTER DE FORMA EFECTIVA

La forma más efectiva de proteger tu router contra esta vulnerabilidad es desactivar completamente la función WPS. Este proceso varía según el modelo y fabricante, pero generalmente puede realizarse accediendo al panel de administración del router a través de un navegador web. Para acceder a este panel de control, normalmente deberás introducir la dirección IP predeterminada del router en la barra de direcciones del navegador, que suele ser 192.168.0.1 o 192.168.1.1, aunque puede variar según el fabricante.
Una vez dentro del panel de administración, busca la sección relacionada con la configuración inalámbrica o seguridad Wi-Fi, donde encontrarás la opción para desactivar el WPS. Además de esta medida fundamental, existen otras acciones complementarias que aumentarán significativamente la seguridad de tu router. Es imprescindible cambiar la contraseña predeterminada de administración del router por una robusta que combine letras, números y símbolos, así como actualizar regularmente el firmware a la última versión disponible para corregir vulnerabilidades conocidas. Configurar una contraseña Wi-Fi compleja utilizando WPA3 (o al menos WPA2) y reducir el alcance de la señal si no necesitas cobertura en zonas alejadas de tu vivienda son también medidas altamente recomendables para mantener a raya a posibles intrusos.