A lo largo de los años, la relación de la familia real británica con el príncipe Harry ha sido una de las más comentadas y, en ocasiones, controvertidas. Sin embargo, la princesa Ana, quien siempre ha sido conocida por su carácter firme y sus opiniones directas, ha mantenido una postura sorprendente de apoyo hacia su sobrino, incluso en los momentos más tensos. La razón detrás de este apoyo tan inusual podría estar vinculada a una profunda conexión familiar y una comprensión más íntima de las luchas personales que enfrenta el duque de Sussex.
La princesa Ana, al igual que él, ha sido objeto de intensas presiones por parte de los medios y sabe lo que es vivir bajo una constante vigilancia pública. Además, la relación entre los dos siempre ha sido cercana; Ana, conocida por ser una de las figuras más pragmáticas de la familia real, tiene un profundo sentido de lealtad y unidad familiar. Para ella, el bienestar de su sobrino está por encima de las diferencias públicas o las críticas externas, lo que la convierte en una de las defensoras más constantes de Harry, incluso cuando las aguas están revueltas dentro de la realeza.
2El día que la familia real británica le dio la espalda al príncipe Harry

El conflicto entre el príncipe Harry y la familia real británica ha sido uno de los cotilleos más debatidos en la prensa internacional en los últimos años. A lo largo de su vida, el duque de Sussex fue constantemente comparado con su hermano mayor, el príncipe Guillermo, el heredero al trono. Mientras uno se preparaba llevar la corona, Harry el otro buscaba tener la misma importancia que el otro, pero con el tiempo comenzó a buscar un perfil más bajo y alejado del ojo mediático de los tabloides y del pueblo de Reino Unido. La llegada de Meghan Markle fue un quiebre en su vida y en su relación con la corona.
El punto álgido del conflicto llegó cuando el príncipe Harry y Meghan Markle, decidieron dar un paso atrás en sus deberes reales en 2020, buscando independencia financiera y personal. Esta decisión no solo sorprendió a la familia real, sino que también provocó una gran crisis interna, ya que fue vista como una ruptura con los tradicionales valores y responsabilidades de la monarquía. El famoso «Megxit», fue un acto de rebeldía contra las expectativas de la familia real y la rígida vida que les había sido impuesta. Fue el escándalo que recorrió el mundo al día de hoy. Desde acusaciones de racismo hasta la falta de apoyo en el que los duques de Sussex acusan con el dedo a la corona.