lunes, 14 abril 2025

Este fallo con Bizum puede vaciarte la cuenta sin que te des cuenta

La revolución de los pagos móviles llegó a España para quedarse, transformando la manera en que manejamos el dinero en nuestro día a día. Pocas herramientas han calado tan hondo y tan rápido como esta aplicación, y es que la facilidad para enviar y recibir dinero al instante mediante Bizum ha simplificado desde dividir la cuenta de una cena hasta saldar pequeñas deudas entre amigos o familiares. Su integración directa en las aplicaciones bancarias ha sido clave, eliminando intermediarios y agilizando transferencias que antes requerían números de cuenta interminables y varios días de espera. Sin embargo, esta comodidad casi mágica esconde una cara B, una vulnerabilidad que no reside tanto en la tecnología como en el factor humano, siempre el eslabón más impredecible.

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La popularidad masiva de esta plataforma la ha convertido, inevitablemente, en un objetivo prioritario para los amigos de lo ajeno. Los ciberdelincuentes, siempre al acecho de nuevas oportunidades, han adaptado sus tácticas para explotar la confianza y, en ocasiones, el desconocimiento de los usuarios. No hablamos de fallos de seguridad complejos ni de hackeos sofisticados a los sistemas bancarios, sino de engaños basados en la ingeniería social, aprovechando la inmediatez del servicio y la posible falta de atención en el momento de confirmar una operación. Un simple despiste, una solicitud inesperada aceptada sin pensar o la trampa bien urdida de un pago inverso pueden tener consecuencias nefastas, dejando nuestra cuenta corriente temblando o, en el peor de los casos, completamente vacía antes de que nos demos cuenta.

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SOLICITUDES MISTERIOSAS: LA PUERTA ABIERTA AL ENGAÑO

Fuente Freepik

Otra modalidad de estafa que explota las funcionalidades de Bizum es el envío de solicitudes de pago fraudulentas. Los delincuentes envían una petición de dinero a la víctima, a menudo acompañada de un mensaje engañoso o que apela a la urgencia, confiando en que el usuario la acepte sin leer detenidamente o por confusión. Puede parecer una trampa burda, pero la realidad demuestra que funciona. Mensajes como «Acepta el pago de la devolución pendiente», «Confirmación necesaria para recibir el premio» o simplemente una solicitud sin texto claro pueden inducir al error, especialmente si nos pillan desprevenidos o estamos esperando algún tipo de ingreso o reembolso real. Aceptar una de estas solicitudes implica autorizar un cargo en nuestra cuenta, no recibir dinero.

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El peligro radica en la similitud visual entre la notificación de un pago recibido y la de una solicitud de pago pendiente en algunas interfaces bancarias, o simplemente en la falta de atención del usuario. Los estafadores suelen utilizar números de teléfono desconocidos, lo que debería ser la primera señal de alarma para cualquiera que reciba una solicitud inesperada. La regla de oro es sencilla: nunca, bajo ninguna circunstancia, se debe aceptar una solicitud de Bizum de alguien a quien no conocemos o si no estamos esperando activamente esa petición específica. Ante la más mínima duda, lo más seguro es rechazar la solicitud y, si es posible, bloquear el número remitente para evitar futuros intentos de engaño. La precaución es vital frente a estas tácticas.

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