Las almejas a la marinera son uno de esos platos que despiertan todos los sentidos. Tienen ese sabor inconfundible a mar, ese toque heredado de los hogares del norte de España que se ha transmitido de generación en generación. Especialmente, expresan el mar Cantábrico en su estado más primitivo: fuerte, vivo, crudo. Esta receta elegante, pero sencilla, es ideal para el día a día o para deslumbrar en una cena especial.
Unas buenas almejas a la marinera tienen el equilibrio perfecto entre almejas y salsa. Una mezcla de ingredientes como ajo, cebolla y vino blanco que, al tratarse adecuadamente, produce una explosión de sabor. El plato ha superado sus orígenes navales para convertirse en un clásico culinario español, particularmente en lugares como Galicia o Asturias. Y la mejor parte es que hacerlas en casa es mucho más fácil de lo que crees.
2Preparación de unas almejas a la marinera con el sabor del cantábrico
El paso inicial para hacer estas almejas a la marinera comienza con la base del sofrito. En una sartén grande, se doran en aceite de oliva ajo picado y cebolla hasta que esté completamente sofrita. Se añade una cucharada de harina para espesar la salsa y, justo después, el vino blanco. Esta mezcla se deja reducir hasta que los sabores se concentran y la salsa toma ese color dorado típico.
Cuando la base está lista, se incorporan las almejas que han sido escurridas y limpiadas. Esto les permitirá abrirse lentamente con el calor, liberando sus jugos en la salsa y dándole un sabor a océano. Cubre la sartén por unos minutos y agrega perejil fresco finamente picado justo antes de servir. El resultado será un plato totalmente exquisito que huele a mar, a hogar, y a tradición.
