La frontera entre lo terrenal y lo mágico se difumina en algunos rincones privilegiados de la geografía española. Aragón esconde entre sus valles pirenaicos paisajes de ensueño que transportan al viajero a tierras nórdicas sin necesidad de cruzar fronteras ni recorrer miles de kilómetros. La cascada de Sorrosal, ubicada en la localidad oscense de Broto, emerge como uno de esos tesoros naturales que desafían la lógica y nos hacen cuestionar si realmente seguimos en territorio nacional o hemos sido teletransportados a un paraje islandés.
El imponente salto de agua de más de 30 metros crea un espectáculo visual que alcanza su máximo esplendor durante los meses primaverales, cuando el deshielo incrementa su caudal y potencia su rugido. Precisamente en Semana Santa, periodo vacacional por excelencia para muchos españoles, este enclave ofrece una alternativa perfecta para quienes buscan escapar del turismo masificado y sumergirse en la naturaleza más auténtica, descubriendo que no hace falta viajar hasta latitudes nórdicas para experimentar sensaciones similares a las que proporcionan los famosos saltos de agua islandeses.
5CONSEJOS PRÁCTICOS PARA VISITAR ESTE RINCÓN MÁGICO DE ARAGÓN

La planificación es clave para aprovechar al máximo la visita a este rincón de Aragón. El alojamiento en la zona, especialmente durante periodos vacacionales como Semana Santa cuando la afluencia de visitantes aumenta considerablemente, debe reservarse con antelación. Los pueblos cercanos como Broto, Torla o Fiscal ofrecen opciones que van desde hoteles con encanto hasta casas rurales y campings, adaptándose así a todos los presupuestos y preferencias.
El calzado adecuado resulta imprescindible para disfrutar plenamente de la experiencia. Aunque el sendero principal está bien acondicionado, las zonas próximas a la cascada pueden resultar resbaladizas debido a la humedad constante generada por el propio salto de agua. Aragón, con su orografía montañosa, exige cierta preparación en el equipamiento del viajero, especialmente si se pretende explorar más allá de los caminos principales y adentrarse en las rutas de senderismo que parten desde la cascada hacia el interior del valle.