Semana Santa es el momento ideal para planificar un viaje que, a pesar de no ser tan largo, tiene la extensión perfecta para relajarse y hacer un stop a la rutina. Semana Santa es el fin de semana adecuado para conocer una isla, antes de que el turismo del verano lo llene de visitantes y la Tabarca de Alicante es la ideal.
Esta es la única isla habitada de la Comunidad Valenciana y, aunque parezca pequeña y perdida en el medio del mar tiene detrás una rica historia de piratas y colonizaciones. Un sitio perfecto que se llega en barca desde Santa Paola y que ofrece una gran riqueza cultural y natural para disfrutar en todo momento.
Las maravillas de la Isla Tabarca, perfecta para Semana Santa
Para llegar a Tabarca se deben tomar las famosas «tabarqueras» desde Santa Paola. Estas son embarcaciones tradicionales que se modernizaron y cuentan con vidrios en su piso para que se puedan observar la riqueza de la fauna marina. Este enclave no cuenta con carreteras ni coches, lo que le dan un espíritu diferente a cualquier otra isla. Sus calles son alegres y sus casas están decoradas con banderines y flores.
Tabarca cuenta con innumerables playas que parecen parte del Caribe por el color turquesa del agua. Sin embargo, esta tonalidad se debe a las praderas de Posidonia oceánica que rodean al territorio y por la que la declararon reserva marina en 1983. Además del arenal central, Tabarca también cuenta con calas y rincones para conocer como la Cala Verde, playa de la Faroleta o playa Gran.
Paraíso en Semana Santa: la mejor gastronomía en Tabarca
Descansar y tirarse al sol no es la única opción en esta magnífica playa. Dentro de la variedad de opciones dentro de Tabarca, existen algunos sitios que son atractivos para recorrer y conocer parte de la mágica historia de este enclave. Entre ellos se encuentra la puerta de San Miguel, el embarcadero antiguo, la puerta de San Gabriel, la casa del gobernador y la plaza mayor, todos puntos de interés para quienes gusten recorrer y disfrutar de otros atractivos en este destino.
Pero también se puede conocer este lugar a través de su comida. Tabarca tiene un plato famoso que todos prueban cuando lo visitan. Se trata del caldero tabarquino, un guiso de pescado a base de arroz y patatas que es un emblema de la región. Además de Santa Paola, para llegar a este destino también se puede ir en ferry desde Alicante con un precio aproximado de 23 euros ida y vuelta.
Otro rincón de Alicante, ideal para Semana Santa
Los que gusten de las bellezas de esta región otro sitio es el ideal para recorrer en Semana Santa. Se trata del Barrio de Santa Cruz de Alicante, un lugar perfecto para hacer a pie con paisajes soñados y vistas a la bahía. Este cuenta con casitas bien decoradas, calles de piedra y bares y restaurantes perfectos para almorzar y descansar degustando lo mejor de la gastronomía.
Este es un destino que se recomienda conocer en Semana Santa y también el primer domingo de mayo, cuando se celebra la fiesta de las cruces. Dentro de las opciones para conocer en el barrio de Santa Cruz se puede recorrer el castillo de Santa Bárbara, que está a una altura considerable para dar con las vistas más espectaculares. Además, en esta fecha particular se puede recorrer la calle San Rafael, hogar de la Hermandad de la Santa Cruz, que tiene una famosa procesión en Semana Santa. Otros sitios dignos de conocer son la Casa Carbonell, la concatedral de San Nicolás y el Museo de Arte Contemporáneo de Alicante, entre otros.
