Ifema pone la sexta marcha para levantar el circuito del Gran Premio de España de Fórmula 1 para 2026 con una nueva licitación. La propietaria del epicentro del paddock ha licitado hasta ahora un total de 149 millones, incluyendo la obra y la cata del suelo para levantar el pit building quince meses del anuncio, que a la postre deja a Cataluña con un pie y medio fuera de la F-1 tras los continuos rescates a Montmeló.
Madrid albergará durante la próxima década el Gran Premio de España y a diferencia del tradicional circuito, que conlleva un sustancial gasto de mantenimiento, la capital escogió la fórmula urbana, al más puro estilo de Mónaco o Miami, pero acotando los límites a la zona norte, entre el recinto ferial y Valdebebas.
El laberinto de 20 curvas y una larga recta está llamado a ser uno de los eventos que más dinero recaude para la ciudad y que rivalizará, salvando las distancias, con la semana del Mobile World Congress, con unos ingresos de 450 millones de euros. Eso sí, con capacidad hotelera más que suficiente en su interior para alojar a los más de 81.000 turistas que se esperan durante la celebración.
El evento está programado para septiembre 2026, mientras que la edificación del pit building estaría lista para mayo de ese mismo año. De esta forma, Ifema espera acabar antes de tiempo, aunque un contratiempo podría dar con todo al traste. Eso sí, a los madrileños no les costará un duro ni la construcción ni tampoco las indemnizaciones previstas en caso de no llegar a tiempo para septiembre. La inversión se realiza a través de inversores privados y con la presentación de ofertas directamente con Ifema, sin pasar por la contratación pública.
‘MADRING’, LLAMADO A SER RENTABLE SIN DINERO PÚBLICO
La gran obra que se está llevando a cabo la realizará la UTE de Acciona con Eiffage, por valor de 83 millones de euros, aunque la licitación alcanzó los 110 millones. Todo para albergar gradas para 110.000 espectadores, así como el edificio que albergará el circo del motor durante tres días al año.
El circuito apenas necesita infraestructuras como en otros países o ciudades dado que se correrá por zona urbana. Es decir, el mantenimiento habitual para las calles de la ciudad de Madrid, que cambiarán durante el evento.

Tras la licitación de las obras, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha ido a EE UU ha realizar un roadshow y mostrar el circuito en una de las ciudades con las que se compara allí a Madrid: Miami. El viaje ha ido como la seda, fácil cuando Madring ya tiene su propia tarjeta de visita y ha encandilado a empresarios e inversores, especialmente de cara a los ingresos publicitarios que se pueden llegar a generar.
MADRING, UN AMBICIOSO PROYECTO CON EL TIEMPO AJUSTADO
Ifema se encargará de su explotación, así como de la imagen de ‘Madring’ para lanzar el ambicioso proyecto, repleto de oportunidades y con un parque hotelero suficiente para albergar a toda la afición foránea y del resto de España.
Por el momento, se desconoce el coste total anual del proyecto. En Barcelona, por ejemplo, es deficitario debido a los gastos derivados de tener un circuito de carreras prácticamente cerrado a lo largo del año, con dos grandes premios y algunas carreras de camiones. En Madrid no necesitarán abonar por ese mantenimiento dado que es una instalación temporal.

Como suele ser habitual en la gestión en las empresas públicas de Cataluña, como lo es Montmeló, la deuda es la gran losa que impide crecer con normalidad. También las reticencias a albergar otro tipo de eventos deportivos o festivos, como podrían ser conciertos, Montmeló se ha instalado en los éxitos pasados para dejar morir un proyecto que ha costado a los contribuyentes cerca de 70 millones de euros en la última década para tapar únicamente las pérdidas. Los números rojos de Montmeló se multiplicarán en caso de no tener listo el plan de crear un gran centro de ocio y espectáculos, mientras los socios habituales del PSC, como En Comú Podem, insisten en cerrarlo.
En Barcelona, el canón para entrar en la Fórmula 1 alcanza los 35 millones anuales, mientras que los promotores del evento también se llevan su tajada de las entradas. Las más económicas rondan los 250 euros, mientras que un Paddok Club podría rondar los 13.000 euros.
Ifema puede albergar lugar para patrocinar el GP de España, pero Liberty, propietaria de los derechos, exige también ciertos avales, como los 100 millones de euros para poder celebrar la carrera. Por ahora, el Ayuntamiento de Madrid y la Comunidad de Madrid podrían contemplar una realización de subvenciones, pero está por ver aún dado que se espera que toda la inversión sea privada.
Ifema recibirá ingresos por la explotación de actividades asociadas a la comercialización de los ingresos, mientras se estiman unos ingresos de 450 millones al año, siempre y cuando Acciona y Eiffage puedan terminar a tiempo la construcción del circuito en su totalidad en menos de 14 meses.
La carrera no cuenta con el apoyo de la oposición en Madrid, como tampoco de los vecinos, más cuando la normativa del ruido impediría su celebración al superar con creces el volumen permitido. No obstante, para el GP de España habrá bula del Ayuntamiento, que tratará de compensar a los vecinos afectados no solo por la Fórmula-1, sino también por los cortes de calles.