El Partido Popular de María Guardiola en Extremadura ha escenificado un nuevo desplante a sus socios de gobierno de VOX en aquella comunidad autónoma. La última ha sido el pasado 27 de marzo cuando el PP, en un inesperado giro de posición, votó en contra junto al PSOE y Podemos de la propuesta de VOX para que los militares pudieran acceder a puestos de las policías locales extremeñas en el pleno de la Asamblea de Extremadura.
La Unión de Militares de Tropa (UMT) estaba presente durante el pleno de la Asamblea extremeña que iba a votar la propuesta que ellos llevaron a VOX para que la defendieran ante los diputados extremeños. Pero en un cambio inesperado el PP votó en contra de la modificación de la Ley de Coordinación de Policías Locales.
Con su postura, el PP «ha tumbado una reforma que contaba con respaldo en la normativa estatal y en acuerdos suscritos entre el Ministerio de Defensa y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Un cambio de postura inesperado del PP La propuesta, impulsada por Vox, pretendía establecer una reserva del 20% de las plazas en la Policía Local para militares de Tropa y Marinería y para Reservistas de Especial Disponibilidad (RED)», explican desde la UMT.
Inicialmente, el Partido Popular permitió la tramitación de la iniciativa, generando expectativas en el colectivo militar, sobre todo en los extremeños que podían ver una salida laboral en su tierra, pero nadie esperaba este cambio de posición, inexplicable, a última hora.

Sin embargo, el Partido Popular se alineó con el PSOE y Unidas por Extremadura para votar en contra, «frustrando así las esperanzas de miles de militares que veían en esta reforma una vía para su reincorporación al ámbito laboral civil. El Partido Popular justificó su decisión alegando que una reforma de tal envergadura no debería aprobarse de forma unilateral, sino mediante un proceso de diálogo con los sectores afectados», dice la UMT.
En la misma línea, sindicatos como CSIF, UGT y CCOO manifestaron su oposición, argumentando que la reserva de plazas vulneraría los principios de igualdad, mérito y capacidad en el acceso a la función pública. Además, advirtieron que la medida podría contribuir al envejecimiento de las plantillas policiales.
Por su parte, la Federación de Municipios y Provincias de Extremadura (Fempex) también rechazó la iniciativa, considerando que la modificación limitaría la capacidad de gestión de los ayuntamientos y afectaría su autonomía en la contratación de agentes.
La UMT, en respuesta, ha criticado duramente estos argumentos, calificándolos de erróneos y carentes de fundamento y explican que «se ha utilizado la excusa de la igualdad de acceso a la función pública para justificar un voto en contra que no es más que una muestra del desconocimiento absoluto sobre la situación de la Escala de Tropa y Marinería, además de confundir a los Reservistas de Especial Disponibilidad (RED) con el personal en reserva, desinformación que ha contribuido al rechazo de la medida. Una oportunidad perdida para la comunidad militar en Extremadura».
MILITARES EN OTRAS COMUNIDADES
Esta misma reforma ya ha sido aprobada y aplicada con éxito en comunidades como Andalucía, Valencia, Madrid y Aragón, lo que demuestra que su viabilidad está fuera de toda duda. «Es un día triste para los miles de militares extremeños que esperaban justicia en su propia tierra y que, una vez más, han sido ignorados por la administración autonómica extremeña», dice la UMT.
Para la UMT, la decisión de la Asamblea de Extremadura no solo supone un golpe para los militares que buscan una salida laboral tras años de servicio, sino que también « evidencia la falta de voluntad política para implementar acuerdos estatales que faciliten su reincorporación al mercado laboral civil, lo que en la práctica seguirá significando, que los Militares seguiremos siendo ignorados por la administración y considerados ciudadanos de segunda», añaden.