La actriz y bailarina Lesly Ochoa que acusó al productor Nacho Cano de un delito contra los derechos de los trabajadores y de favorecer la inmigración irregular ha interpuesto denuncia por «un presunto delito de odio, así como por los demás delitos que como consecuencia de la investigación puedan tener conexión con los hechos que se relatarán a continuación, contra los titulares de las cuentas de la red social Facebook con usuarios (…)».
La denuncia relata que el pasado 9 de febrero de 2027 la coreógrafa publicó una foto suya en su perfil social de Facebook y esa publicación provocó que se realizaran «una serie de comentarios de carácter claramente ofensivo, discriminatorio y de incitación al odio», según recoge el escrito.
Además, los dos comentarios fueron dirigidos «contra un colectivo de personas o grupo social en concreto, personas de una determinada raza», dice la denuncia.
Lesly Ochoa cree que esos comentarios son constitutivos de un delito de odio recogido en el artículo 510 del código penal español.
Su abogado, Alfredo Arrien, pide que se practiquen al menos dos diligencias. El ofrecimiento de acciones penales a su defendida y que se libre oficio a la Brigada de Identificación Tecnológica de Policía Nacional para identificar la identidad de los usuarios de Facebook autores de los comentarios.
Hay que recordar que Lesly Guadalupe Ochoa se convirtió en protagonista de la actualidad judicial por una curiosa combinación: Fue imputada por un juzgado de Madrid por una denuncia del productor Nacho Cano y en otro es la presunta víctima de Nacho Cano.
Lesly es parte afectada en el proceso del cantante por los presuntos delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y de los trabajadores. Lesly, por su parte, también está imputada por un delito de amenazas condicionadas.
La defensa de Nacho Cano, Cremades & Calvo-Sotelo, entregó ante la Justicia una serie de mensajes de WhatsApp de Lesly a la responsable de producción de Malinche. En uno decía lo siguiente: «Hablé con mi abogado y me dijo que podría demandarlos por negligencia, discriminación, maltrato psicológico y privación de libertad en el hostal, entre otras cosas».
«Solicito como gratificación de daños y perjuicios una carta de recomendación de Nacho Cano; 5.350 euros depositados en la cuenta de mi madre en México; y mi estadía pagada junto con las comidas en un hotel u hostal hasta el 15 de enero», escribía en otro mensaje.

Hay que recordar que en diciembre del pasado año Lesly Guadalupe Ochoa declaraba en el Juzgado de Instrucción número 22 de Madrid como imputada por este delito de amenazas contra Nacho Cano. Ante la Jueza Patricia Jiménez-Alfaro la bailarina mexicana se declaraba «inocente» del delito que se le imputa y reclamó que su despido del musical Malinche fue «improcedente».
«Hubo hechos y comentarios por parte de mis compañeros y de la organización que muchas veces me hicieron sentir discriminada. Nací con una condición diferente en mi mano izquierda y creo que no reuní las características físicas para el señor Nacho Cano. Creo que esa fue la verdadera razón», decía aquel día a los periodistas la mexicana, que además volvía a cantar Lucha de gigantes, como ya hizo en noviembre.