Carlo Ancelotti, entrenador del Real Madrid se enfrenta a una pena de cuatro años de prisión y una multa de casi 3,186 millones de euros por haber defraudado presuntamente a la Agencia Tributaria. La Sección 30 de la Audiencia Provincial de Madrid juzgará este próximo miércoles al afamado entrenador merengue.
El presunto fraude a las arcas públicas asciende a un total de 1,062 millones de euros por los ejercicios fiscales de 2014 y 2015, cuando ostentó el galardón de ser el entrenador mejor pagado de España, con unos honorarios que ascendían a 7,5 millones de euros. La Agencia Tributaria cobró mediante un embargo un total de cerca de 1,5 millones de euros, divididos entre 1.217.958; otros 243.593 euros por recargo en apremio y otros 47.298 de intereses, según escrito de acusación al que ha tenido acceso MONCLOA.
Según la acusación de la Fiscalía Provincial de Madrid, Ancelotti firmó el contrato el 4 de julio de 2013 y hasta el 30 de junio de 2016. Al residir fuera de España durante el primer ejercicio no se le podía exigir nada.
ANCELOTTI, EL ENTRENADOR MEJOR PAGADO DE ESPAÑA
El contrato con el club presidido por Florentino Pérez fijó y especificó una remuneración, junto con los rendimientos del trabajo, «derivados de la cesión de los derechos de imagen al club». Ancelotti duró aquella etapa hasta el 25 de mayo de 2015, pero se mantuvo en España, según la Fiscalía, hasta octubre de ese mismo año, siendo su residencia en Madrid el principal centro de relaciones personales, económicas y profesionales.
En esos ejercicios cobró un total de 14.867.622 euros del Real Madrid por rendimientos del trabajo, mientras que la Fiscalía entiende que debió haber tributado «por su renta universal en nuestro país también en este ejercicio 2015». Cabe destacar que el escrito es similar al de Xabi Alonso, vencedor en los tribunales hasta en cinco ocasiones ante el fisco.
Según el ministerio público, Carlo Ancelotti tendría un complejo entramado societario, con fideicomisos y sociedades instrumentales para percibir los cobros, simulando la cesión de los derechos de imagen a sociedades sin actividad ni capacidad de explotación de los mismos. A su juicio, el sistema fiscal de Ancelotti se ideó para ocultar el beneficiario real de los rendimientos procedentes de la explotación de sus derechos de imagen.
FACTURAS A TRAVÉS DE DOS SOCIEDADES
El supuesto entramado fiscal se diseñó «de manera que ni él mismo, ni ninguna de dichas sociedades tuviesen que tributar por las cuantiosas cantidades percibidas, en España o fuera de nuestro país», sostiene el escrito de acusación al que ha tenido acceso MONCLOA.
Ancelotti cedió, «aparentemente», sus derechos de imagen a la entidad Vapia Limited por un periodo de diez años y por un precio de 25 millones de euros, «que habría de permanecer pendiente como un préstamo libre de intereses, con obligación de reembolso por el comprador a petición del vendedor».
Ancelotti cobró una remuneración de 1 euro por ser apoderado de la firma de sus derechos de imagen
Un día después de firmar con el Real Madrid, la sociedad Vapia Limited nombró como apoderado a Ancelotti, con los máximos poderes para gestionar los derechos de imagen supuestamente cedidos en virtud del pacto previo, con una «remuneración por este apoderamiento de 1 euro».

Después, pero sin concretar una fecha exacta, «se formalizó un anexo al acuerdo de venta de 1 de julio de 2013, que modificaba el mismo en el extremo de que el plazo de duración de la relación contractual pasaba a ser de tres años», en vez de los 10 iniciales y «el precio de compraventa de los derechos de imagen se reducía a un millón de euros anuales frente al pago de 25 millones anteriores para una década. No hubo penalización alguna para la sociedad ni tampoco una indemnización para Ancelotti, «a pesar de estos cambios tan sustanciales y en su perjuicio».
El 4 de julio de 2013, de forma paralela a la firma del contrato de trabajo como entrenador, se selló otro contrato privado de cesión de derechos de imagen, Ancelotti actuó en su propio nombre y representación, pero también en nombre y representación de una sociedad «innominada y no determinada que explota sus derechos de imagen».
UNA SOCIEDAD PARA SER APODERADO POR 1 EURO
Esta sociedad tendría cedidos los derechos de imagen y pactó con el Real Madrid la cesión del 50% de la imagen de Ancelotti al club de Florentino Pérez entre el 5 de julio de 2013 y el fin de la temporada 2015/2016. Se requirió al Real Madrid la identificación de dicha empresa, que tenía un plazo para responder de solo tres meses.
No obstante, no lo hizo hasta pasado un año y mediante un escrito sin fecha en que se indicaba que la entidad Vapia LLP -distinta de Vapia Limited, titular aparente de los derechos en virtud del contrato de 1 de julio de 2013) «era el titular de los derechos de explotación de imagen del obligado tributario hasta el 30 de junio de 2023».
Vapia Limited tenía la sede en las Islas Vírgenes Británicas, en la ciudad de Tórtola, un país de baja tributación. Para su constitución solo fue necesario un dólar, para después, el 17 de enero de 2014, venderse a Appledore Consulting Limited, con sede en Reino Unido y cuyo nombre aparece en los conocidos como «Pandora Papers».
Para esa empresa se colocaron a Greg Mc Rae y Jack French, que actuaron presuntamente como fiduciarios de un tercero, John Mcluskie, quien a su vez era un fideicomisario respecto de The Nani Settlement, «fideicomiso precisamente constituido por Carlo Ancelotti, el único y real beneficiario del mismo junto a su esposa».
Vapia LLP, con sede en Londres se constituyó pocos meses después de la llegada del italiano al Real Madrid, el 4 de octubre afloró una participación del 99% en manos de Vapia Limited, mientras que el 1% restante pertenece a Ditomac BVI, con sede en las Islas Vírgenes Británicas y vinculada a Appledore Consulting, sus socios y al fideicomiso The Nani Settlement.
De esta forma, el entrenador acusado de fraude fiscal usó Vapia LLP para presentarse como la titular de los derechos de imagen ante el Real Madrid, «a pesar de que ni siquiera formalmente los tenía atribuidos, ya que el contrato de cesión referido de 1 de julio de 2013 lo era con Vapia Limited».
UN ENTRAMADO SOCIETARIO COMPLEJO
Este entramado societario le valió a Ancelotti para llegar a registrar declaraciones de la Renta 2015 y Renta 2016, correspondientes a los ejercicios 2014 y 2015, respectivamente, «cuotas negativas, y a solicitar y obtener de la Agencia Tributaria (AEAT) devoluciones por el supuesto exceso en su tributación».
El saldo negativo en 2014 arrojó un beneficio para Ancelotti de 39.575,17 euros, mientras que en 2015 la cantidad se disparó a los 529.078,41 euros. La Agencia Tributaria le devolvió los primeros el 14 de julio de 2015, mientras que hizo lo propio con la segunda devolución el 17 de agosto de 2016 sin que llegaran a saltar las alarmas entonces a pesar de tener una nómina de 7,5 millones de euros por temporada.

En el ejercicio 2014, Vapia LLP facturó 1,015 millones de euros al Real Madrid, que el realizó la correspondiente retención de 251.212 euros, mientras recibió otros 100.000 euros de Nexon Europe. Vapia Limited, por su parte, facturó y percibió 62.437 euros de Cecil Purnell SA y otros 64.086 euros de Nike
En el ejercicio de 2015, Vapia LLP anotó conceptos por un importe de 2,59 millones de euros del Real Madrid. La cantidad correspondió al pago de la indemnización por la resolución del contrato, por el que se le practicó una retención de 621.789,17 euros, y otros 15.000 euros de la sociedad All Contents.
Vapia Limited, por su parte, facturó 243.570 euros de Cecil Purnell SA, otros 37.500 de Nike, 56.250 euros de Perform Media Sales LTD; 24.545 euros de Imagosport Comunication SL y 9.204 euros de CAA Sports. Percibió otros 70.000 euros de Magnolia TV España por un programa televisivo en la productora de Cámara Café para Mediaset y fusionada ese mismo año con Banijay. Además, cazó otros 13.709 euros de Academy for Excelence por su asistencia a la cena de gala en Londres.
ANCELOTTI Y LA DEVOLUCIÓN
Por los rendimientos derivados de la cesión de los derechos de imagen, percibió otros 1.248.589,58 euros en 2014 y 2.959.788,30 euros en 2015. No obstante, ni Carlo Ancelotti, ni Vapia LLP ni Vapia Limited ni ninguna de otras sociedades radicadas en España declarase ni tributase por las cantidades.
Además, Ancelotti ocultó presuntamente la titularidad de dos bienes inmuebles sitos en el extranjero, uno en Vancouver (Canadá) y otro en Parma (Italia), que supusieron una imputación de rentas por la AEAT de 23.059,84 euros en cada ejercicio.
La Agencia Tributaria detectó un fraude de 386.361 euros en el ejercicio 2014 y de otros 675.718 euros en el ejercicio 2015.