miércoles, 2 abril 2025

La comida del avión que puede arruinarte el viaje si no la evitas

Subir a un avión es, para muchos, el preludio de unas vacaciones soñadas o el cumplimiento de un importante compromiso laboral. Sin embargo, la experiencia de volar puede verse empañada por un factor que a menudo pasamos por alto: la comida que nos sirven a bordo. Una elección descuidada puede convertir un viaje placentero en una auténtica tortura digestiva.

Publicidad

El avión, ese medio de transporte que nos permite cruzar continentes en cuestión de horas, se convierte a veces en una trampa gastronómica donde la salud y el bienestar quedan relegados a un segundo plano. La oferta de comida a bordo, caracterizada por su alto contenido en sodio, grasas y carbohidratos simples, puede ser un auténtico enemigo para nuestro organismo.

4
PREPARA TU PROPIA COMIDA PARA EL AVIÓN

Fuente: Freepik

La mejor forma de asegurarte de que comes de forma saludable en un avión es preparar tu propia comida y llevarla contigo. De esta forma, puedes controlar los ingredientes y evitar los alimentos procesados, ricos en sodio, grasas y azúcares. Una opción práctica y económica que te permite cuidar tu salud y tu bolsillo.

Puedes preparar sándwiches integrales con verduras y proteínas magras, ensaladas con aliños ligeros, frutas frescas, frutos secos naturales y barritas energéticas caseras. Asegúrate de llevar recipientes herméticos y de cumplir con las normas de seguridad del aeropuerto en cuanto al transporte de líquidos. Una inversión en salud que te agradecerá tu organismo.

Además de la comida, es importante llevar contigo una botella de agua reutilizable y rellenarla después de pasar el control de seguridad. La deshidratación es uno de los principales problemas que afectan a los viajeros en avión, por lo que es fundamental mantenerse hidratado durante todo el vuelo. Un hábito saludable que te ayudará a sentirte mejor y a disfrutar más de tu viaje.

Publicidad
Publicidad