Cuando pensamos en métodos para perder peso, es común que nos vengan a la mente imágenes de gimnasios llenos de gente sudando la gota gorda o carreras interminables bajo el sol. Sin embargo, el pilates, una disciplina que a menudo se asocia con la flexibilidad y la tonificación, también puede ser un aliado sorprendente en la lucha contra los kilos de más. ¿Quién dijo que para adelgazar hay que sufrir?
A menudo subestimado como una actividad «suave», el pilates esconde un potencial quemagrasas que va más allá de la simple relajación y los estiramientos. Se trata, de una disciplina que trabaja el cuerpo de forma integral, fortaleciendo los músculos profundos, mejorando la postura y, sí, también ayudando a perder peso.
4EJERCICIO 2: EL ROLL UP, UN DESAFÍO PARA EL ABDOMEN Y LA ESPALDA
El «Roll Up» es otro ejercicio fundamental del pilates que, además de fortalecer el abdomen, mejora la flexibilidad de la columna vertebral. Se trata, de un movimiento lento y controlado, que requiere una gran concentración y coordinación. Un ejercicio completo y exigente, digno del pilates.
Para realizar el «Roll Up», nos tumbamos boca arriba con las piernas extendidas y los brazos estirados por encima de la cabeza. Desde esta posición, inhalamos y comenzamos a elevar la cabeza y los hombros del suelo, vértebra a vértebra, hasta sentarnos completamente. La clave es hacerlo despacio. Luego, exhalamos y comenzamos a bajar lentamente, redondeando la espalda y controlando el movimiento, hasta volver a la posición inicial. Este ejercicio, que puede resultar desafiante al principio, se vuelve más fácil con la práctica. El pilates requiere constancia.