jueves, 13 marzo 2025

Los policías, contra Marlaska tras la humillación: «Ningún ministro llegó tan lejos»

Fernando Grande-Marlaska se ha tomado cinco días de silencio tras la polémica generada por la nueva humillación del PSOE ante Junts para allanar la expulsión de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, Policía Nacional y Guardia Civil, de Cataluña. La vuelta del ministro de Interior no ha estado exenta de tensión, más cuando sus primeras palabras se han centrado en justificar la nueva cesión a los Mossos d’Esquadra de tareas y trabajos hasta ahora reservadas exclusivamente a la Policía Nacional y Guardia Civil, como es velar por el cumplimiento de la normativa de Extranjería e Inmigración.

El Gobierno de Pedro Sánchez, con el beneplácito de Grande-Marlaska, que se negó a aceptar la cesión, pero que mantiene su apoyo al líder del PSOE, paga así los siete votos de Junts por una competencia intrasferible e inadmisible, dado que se pone en riesgo todo el sistema de seguridad de España, más cuando se le entrega a los Mossos d’Esquadra información sensible.

Sánchez afirmó que los Mossos d’Esquadra forman parte de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, pese a que sus competencias se circunscriben únicamente a Cataluña, sin capacidad de actuar fuera de la demarcación señalada, al contrario que la Policía Nacional o Guardia Civil. Asimismo, el jefe del Ejecutivo y el PSOE recuerdan la cesión de competencias con los pactos del Majestic para justificar esta nueva humillación a los agentes de ambos cuerpos.

Las contradicciones de Marlaska, antaño juez de prestigio por sus investigaciones contra ETA, sobresalen en sus propias declaraciones. «No es una cesión, ni un pago, ni mucho menos una claudicación, ni un atentado contra la seguridad del país ni contra la unidad de la Nación», ha afirmado el ministro de Interior, que vuelve a señalar al artículo 150.2 de la Constitución para delegar competencias.

MARLASKA RETUERCE LA CONSTITUCIÓN PARA JUSTIFICAR LA HUMILLACIÓN DEL PSOE ANTE JUNTS

El argumento fue ampliamente destruido en un informe de Jupol, presentado en el Congreso de los Diputados, y por Impulso Ciudadano en unas declaraciones a MONCLOA dado que solo se puede hacer con competencias «susceptibles» de ser cedidas o delegadas y hasta ahora inmigración y extranjería eran una línea roja, que incluso el propio Marlaska negó su posible transferencia al ser «inconstitucional».

Una cesión a cambio de votos, la dictadura de la aritmética parlamentaria aplicada ahora por Marlaska, con el aplauso del PSOE y PSC

Pero los votos apremian y Junts no espera más para continuar ganando peso y competencias para Cataluña sin haber cedido un ápice en toda la negociación. Es decir, el PSOE y el PSC de Salvador Illa entregan sin recibir nada a cambio, pero para Marlaska no se trata de una «cesión», pactada en Bruselas y con un prófugo de la Justicia, todo un ejemplo para un partido que ha perdido toda ideología, así como roto todos los consensos forjados en la Transición.

Así las cosas, Marlaska niega el texto del acuerdo pactado entre PSOE y Junts al afirmar que el Estado no cede el control de fronteras ni de los flujos migratorios irregulares. El ministro obvia, además, el propio texto constitucional en su artículo 150.2, que dice estrictamente que debe ser el Estado, y no los partidos políticos, quien haga ese traspaso. Dado que hay un pacto y lo hacen dos partidos políticos, tampoco su explicación se ajusta a la Carta Magna, que debe conocer al ser uno de los jueces que gozó del prestigio de la sociedad.

La Constitución Española deja claro que la cesión de competencias corresponde al Estado, no a los partidos políticos. | Fuente: CE
La Constitución Española deja claro que la cesión de competencias corresponde al Estado, no a los partidos políticos. | Fuente: CE

Pero el titular de una cartera crítica para España afirma que hay «falta de rigor». No obstante, Marlaska ha evitado referirse al requisito de la «catalanidad» para la acreditación del permiso de residencia, tal y como refleja el xenófobo pacto entre PSOE y Junts.

MARLASKA, EL AGRAVIO CONSTANTE CONTRA LA POLICÍA NACIONAL

Esta justificación ha colmado el vaso de los agravios y la Confederación Española de Policía (CEP) ha empezado a dar los pasos para alejarse del ministro de Interior. Los propios agentes afectados por la cesión ilegal del Estado a Cataluña en materias de inmigración y Extranjería se han encargado de recordárselo, mientras le despojan de uno de los premios y reconocimientos más prestigiosos de los representantes sindicales.

Lejos queda ahora la figura de Marlaska como magistrado titular del Juzgado Central de Instrucción 3 de la Audiencia Nacional y su premio Justicia y Libertad. Fue todo un reconocimiento para el entonces magistrado de la Audiencia Nacional.

El propio sindicato apunta que fue un premio acertado, pero ha dejado de serlo tras acreditar el desprecio hacia los derechos profesionales, como la equiparación salarial con los Mossos d’Esquadra y su reconocimiento como profesión de riesgo, al mismo tiempo que encabeza el mayor ataque contra la Policía Nacional «en toda la democracia» por las cesiones a los Mossos d’Esquadra, que tienen ahora también la misión de vigilar la costa, con un departamento específico, a pesar de que no ocurre en ningún otro sitio de España.

Fernando Grande-Marlaska y Salvador Illa rompen la soberanía nacional al entregar a Cataluña la competencia de Extranjería | Fuente: Agencias
Fernando Grande-Marlaska y Salvador Illa rompen la soberanía nacional al entregar a Cataluña la competencia de Extranjería | Fuente: Agencias

«Ninguno de sus catorce predecesores había ido tan lejos, tolerando semejante agresión competencial que arrincona y margina a la Policía Nacional y a la Guardia Civil», apuntan desde el sindicato.

MARLASKA HACE OÍDOS SORDOS ANTE LOS POLICÍAS NACIONALES

La retirada del galardón a Marlaska se debe tras años de desplantes, promesas incumplidas y hacer oídos a sus reivindicaciones para conseguir una «jubilación digna, el reconocimiento como
profesión de riesgo, la equiparación salarial real y mayor protección física y jurídica ante el intolerable aumento de agresiones a policías en la calle».

Los propios agentes del CEP ponen de manifiesto que el «escándalo de lo ocurrido con las cesiones a los Mossos» se debe llanamente a la «dictadura de la aritmética parlamentaria», es decir, a cambio de los siete votos de Junts para mantener al PSOE en La Moncloa. «Entre los policías y el ministro, siempre con los policías», resumen desde el CEP.

Marlaska se gana así un desprecio absoluto por parte de los agentes de la Policía Nacional tras años de golpes desde el Ministerio de Interior. Muestra de ello son las tres de las nueve veces que ha presidido el Pleno del Consejo de Policía y en el próximo mes se cumple un año de conflicto colectivo contra Interior. En este sentido, esperan que sea cesado o bien dimita del cargo. Todo un logro que destruye una trayectoria judicial brillante.