Los churros caseros son un placer de la vida, un bocado que siempre apetece, sea la hora que sea. Ya sea al desayuno, para empezar el día con energía y una dulce motivación, o como merienda, para acompañar con un delicioso chocolate caliente. La textura de los churros es perfecta, crujientes por fuera y suaves por dentro, razón por la que puede llegar a ser el dulce favorito de muchos españoles.
Aunque muchos optan por comprar los churros en churrerías o restaurantes especializados en ello, no hay nada como hacerlos tú mismo. Hacer churros caseros es mucho más fácil de lo que podrías imaginar y lo mejor de todo es que podrás disfrutarlos frescos, recién hechos, con un sabor auténtico a hogar. A continuación te enseñaremos cómo hacer unos exquisitos churros, con pocos ingredientes y una preparación muy sencilla.
2Paso a paso para hacer unos churros caseros exquisitos
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Lo primero que debes tener en cuenta es que para unos churros perfectos el truco está en la masa y la fritura. La idea es mezclar todos los ingredientes que se mencionaron anteriormente con una cantidad justa de agua, hasta lograr una masa homogénea y manejable. Cuando la masa ya esté lista, se procede a ponerla en una manga pastelera con boquilla de estrella, para darle la forma característica al churro.
Después de tener la masa lista en la manga pastelera, se debe poner en un sartén abundante aceite y debe estar bien caliente. Los churros se fríen hasta que veas que tengan un tono dorado perfecto. Uno de los secretos para unos churros caseros perfectos, es mantener controlada la temperatura del aceite, para que queden crujientes y no absorban tanta grasa. Por último, se sacan del aceite y se escurren sobre papel absorbente y se espolvorean con azúcar.