Dentro de la industria cinematográfica nacional, Álex de la Iglesia es reconocido por ser el padre de grandes obras de terror, las cuales tienen sutiles elementos del humor negro, que lograron convertirse en todo un éxito comercial; dentro del catálogo de RTVE Play, los españoles pueden encontrar un gran número de películas que llevan la firma de este director, pero ninguna otra como esta película de horror, la cual logró batir el récord que poseía El día de la Bestia, la película de terror de Álex que tenía la corona de ser la obra de horror con más Goyas.
Esta joya del horror que oculta RTVE Play, le da una nueva imagen a una histórica figura del folclore del mundo y está protagonizada, como suele ocurrir en cada producción del director, por las estrellas más exitosas de la nueva y antigua era del cine español; por otra parte, para fabricar el guion de esta cinta, de la Iglesia se basó en estudios históricos, en los cuales se exploran en la leyenda de las brujas.
5Una comedia de terror con una base histórica

Durante una rueda de prensa, donde dio a conocer detalles sobre la cinta, Álex de la Iglesiareveló que para crear el guion de su obra, se basó en los ensayos de universitario y antropólogo Mikel Azurmendi Intxausti, el cual puso sobre la mesa el polémico acto de fe que efectuó la Inquisición Española en 1610: asesinar mujeres que eran acusadas de brujas. Según estos ensayos, durante esta oscura etapa de la historia española, treinta y nueve mujeres de treinta Zugarramurdi fueron quemadas en la hoguera, sin obtener un justo juicio.
Intxausti fue un reconocido profesor universitario, historiador y antropólogo español, el cual logró dejar una huella importante dentro del país; el ensayo que inspiró al director, el antropólogo lo publicó en tiendas después del estreno de la película, donde Mikel descubrió que el asesinato de las mujeres, fueron el resultado de una denuncia de una mujer de ese pueblo, la cual soñó que las personas que había denunciado, participaban de un aquelarre de brujas, siendo este la única prueba que utilizó la justicia, un hecho que confirmaba la locura inquisitorial que se había apoderado de la época.