Pedro Sánchez vuelve a utilizar su fórmula mágica para conseguir los apoyos tras cosechar la negativa del Congreso de los Diputados a su decreto ómnibus, donde se incluyeron medidas de toda índole como las subidas de las pensiones y entregar el rédito económico por un palacete en París al PNV pese a tener una sentencia contraria del Tribunal Supremo en 2003. El PSOE y sus socios de Gobierno más fieles obtuvieron la derrota más dolorosa en el Congreso de los Diputados desde el inicio de la legislatura, pero no se dan ni por aludidos ni por vencidos.
«Buscaré los votos hasta debajo de las piedras», se compromete el presidente del Ejecutivo como si de una nueva arenga se tratase. La realidad es que cada vez que se ha pronunciado dicha promesa se ha pagado el favor de los votos de los socios con medidas muy concretas. Lo hizo en 2020 y en 2023, justo antes de las elecciones generales del 23-J y ahora, con el rechazo de Junts, vuelve a insistirlo.
La última vez que Pedro Sánchez pronunció estas palabras Junts y ERC obtuvieron la amnistía, mientras el PNV recogió las nueces en forma de competencias en el País Vasco a cambio de sus seis diputados, claves en todas las votaciones en el Congreso. El líder del PSOE ha sabido ganarse a la derecha vasca formando gobierno en la Lehendakaritza por tercera legislatura consecutiva.
Para «buscar esos votos debajo de las piedras», el PSOE insiste en levantar las rocas con las manos desnudas, emulando a Sísifo, el rey condenado a llevar una gran roca a lo más alto de la montaña y una vez allí, por su propio peso, la piedra rodaba ladera abajo, eternizando así un castigo de por vida.
PEDRO SÁNCHEZ, CON LOS PRESUPUESTOS DE 2023 Y SIN ELECCIONES A LA VISTA
Pedro Sánchez continúa sin Presupuestos, dos años después de aprobar las primeras cuentas, mientras tampoco logra imponer el catalán en la UE a costa del dinero de todos los españoles ni conseguir la aplicación de la amnistía para Carles Puigdemont, pese a los indultos y aprobar una ley que enmienda a la totalidad todos los consensos resultantes de la Constitución.
El PSOE de Pedro Sánchez firmó estas exigencias en el acuerdo de legislatura junto con otras más, como la reforma de la Ley de Extranjería
El PSOE de Pedro Sánchez firmó estas exigencias en el acuerdo de legislatura junto con otras más, como la reforma de la Ley de Extranjería, donde la Generalitat de Cataluña tendría la potestad para decidir sobre la recepción de los nuevos inmigrantes. Por esta razón, el Ejecutivo de Pedro trató de responsabilizar al PP del fracaso en las negociaciones, como está haciendo ahora tras el rechazo de Puigdemont a la revalorización de las pensiones y otras 42 modificaciones de leyes. Estos cambios se hicieron, además, sin el consenso debido ni tampoco con una negociación previa.
La estrategia del PSOE pasa por culpar al PP de todas las responsabilidades del Gobierno, manifestación sindical incluida el próximo 3 de febrero. Para tratar de fortalecerlo, los socialistas se echan en brazos de Carles Puigdemont, que espera con su lista de pedidos, algunos nuevos, como la subida de las pensiones por encima del resto, mientras exige las competencias sobre extranjeros y la salida inmediata de la Guardia Civil y Policía Nacional de las infraestructuras críticas como paso previo a entregar todas sus competencias a los Mossos d’Esquadra.
Junts y PSOE pusieron blanco sobre negro numerosos puntos genéricos para poder asociarse en el denominado bloque progresista, pero los socialistas no han llegado a tiempo para cumplir las promesas pactadas.
JUNTS EXIGE AÚN MÁS AL PSOE TRAS CONGELAR NEGOCIACIONES
Pese al rechazo rotundo, Junts no ha roto por completo la negociación con el PSOE. «Se han congelado» hasta que haya un cambio sustancial en las condiciones, que se pactarían en las continuas reuniones de Santos Cerdán y su fiel escudero en Bruselas, el bedmarense Juanfran Serrano, tratan de desbloquear la comprometida situación, más cuando la oposición aprieta con dureza para desmontar los bulos lanzados desde la izquierda y sus altavoces afines sobre el decreto macedonia que afecta a asuntos de calado sobre la asistencia social, ayudas a los afectados por la DANA, el comercio, a las subvenciones por el transporte, consumidores y usuarios.
No eran las únicas leyes cambiantes con el real decreto. También afectaba a las normas sobre acceso a la información, activos financieros, arrendamientos urbanos, asistencia social, comercio electrónico, a la CNMC, las clases pasivas, empleo, energía eléctrica, ferrocarriles, gestión fiscal, haciendas locales, al impuesto sobre Actividades Económicas, a Impuestos sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, a Patrimonio, el Impuesto Sobre el Valor Añadido, al IRPF, a la Renta de los no residentes, al Impuesto sobre Sociedades, a los Impuestos Especiales, Inmigración, menores y partidos políticos, entre otros, como mantener la ocupación ilegal de viviendas, así como a la Seguridad Social e incluso el terrorismo, según el análisis extraído del Boletín Oficial del Estado.
Todo ello estaba integrado en el decreto derogado por el Congreso de los Diputados, mientras el PSOE insiste en aprobarlo todo, aunque con una fórmula para evitar tener que recular. Tanto Junts como el PP hubieran votado favorablemente a las subidas de las pensiones y a la prórroga a las ayudas en el transporte, así como a las de los afectados en Valencia.
EL PP GANA EN LA CALLE EL RELATO FRENTE AL PSOE
«El resto sobra en un decreto que se dice social», señalan los ‘populares’, que inician una recogida de firmas para dar a conocer al verdadero responsable de que las pensiones no tengan aún su revalorización correspondiente a partir del próximo mes de febrero, debido a que en este enero está garantizada el incremento en un 2,8%.
Cabe señalar que a pesar de la derrota del Ejecutivo en el Congreso, la Constitución exige esa revalorización de las pensiones, por lo que se pagarían con efecto retroactivo, aunque está por ver si el castigo será efectivo también en las urnas dentro de dos años.
En esta «ofensiva», tanto en el Senado, Congreso como en la calle, los ‘populares’ mantienen la presión para recordar que es el Ejecutivo quien decide qué llevar desde el Consejo de Ministros y si dispone de los apoyos parlamentarios suficientes. Por el momento, la piedra que tanto busca Pedro Sánchez está sobre el tejado de La Moncloa, aunque la haya recogido para lanzar a los pensionistas contra la oposición.
EL PSOE EVITA COMPARECER TRAS TOMAR A LOS PENSIONISTAS COMO REHENES
En el PSOE no ha sentado nada bien la derrota en el Congreso, hasta el punto de suspender la rueda de prensa tras la Comisión Ejecutiva Federal. Esther Peña, portavoz del partido, ha evitado aparecer ante los distintos frentes abiertos en Ferraz y en La Moncloa, manteniendo así el relato desde los principales altavoces ministeriales, con Óscar Puente y Óscar López como principales espadas, a las que se suman Elma Saiz e Isabel Rodríguez.
El ruido montado por el PSOE le tapa también de su fracasada ley de Vivienda tras prometer 800.000 viviendas en todos los anuncios realizados desde 2018. El PNV, por su parte, se mantiene cauto, aunque sin palacete en París, sede del Instituto Cervantes en la ciudad de las luces. De haberse aprovado ese decreto, contrario a una sentencia del Tribunal Supremo fechada en 2003, los ‘aprovechategui’ de Andoni Ortuzar y Aitor Esteban estarían en condiciones de haber pedido otros tres inmuebles más.
De hecho, el malestar del PNV no es precisamente por la no revalorización de las pensiones o el fin de las ayudas al transporte o el hecho de que los damnificados de la DANA se hayan quedado sin nuevas ayudas, sino por la pérdida de ingresos potenciales por valor de 15 millones de euros, un montante más que suficiente para ensanchar la base y contrarrestar el poder de Bildu en las instituciones y en la calle.
SANTOS CERDÁN NEGOCIA CON PUIGDEMONT
Todo queda así en manos de Santos Cerdán y de Carles Puigdemont, que trata de sacar rédito personal y partidista del PSOE, más cuando los socialistas de Pedro Sánchez insisten en hacer de la necesidad virtud. Por el momento está por ver en qué cederá el PSOE ante Junts, mientras los de Puigdemont insisten en presionar y presionar, más cuando están obteniendo un mayor rédito político que con el PP. Eso sí, dentro del Ejecutivo hay voces contrarias a otorgar las competencias de Extranjería a la Generalitat.
Esta materia es crucial para Junts, más por la irrupción de Aliança Catalana, que irrumpió en el Parlament las pasadas elecciones autonómicas y sus adeptos van en aumento, más cuando son ahora víctimas de la extrema izquierda, como la CUP y Arran, como ha ocurrido este pasado fin de semana cerca de la plaza de Sants en una carpa informativa, con un hospitalizado al ser empujado al suelo por uno de los atacantes.
