La seguridad en el coche dejó de existir con una nueva modalidad de robo que está en auge en 2025 en todo España. El coche puede ser un blanco fácil y un objeto de deseo de los delincuentes que encontraron en él una nueva obsesión: los Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor (ADAS). Esto es un grupo de mecanismos tecnológicos diseñados para garantizar la seguridad del conductor y el coche. Quienes posean este tipo de sistemas en su vehículo podrán evitar riesgos y accidentes mediante una serie de acciones que este tipo de dispositivos son capaces de ejecutar.
Los sistemas ADAS tienen una serie de diferentes funciones inteligentes que muchos conductores decidieron aplicar para evitar sufrir males mayores. Entre las acciones que se pueden ejecutar, se encuentra la de Asistente de velocidad inteligente (ISA); detector de somnolencia (DDR), para que los conductores no sufran el riesgo de dormirse ante el volante y la de Alerta de cambio involuntario de carril (LDW), para avisar en caso de que se cometa esa infracción involuntaria. Estas tecnologías son muy atractivas para los maleantes, por lo que muchos expertos alertan sobre esta tendencia y qué hacer para prevenirlas.
2Cómo evitar la sustracción del sistema ADAS en el coche
Aunque no existe una fórmula secreta para poder evitar este mal, los conductores pueden seguir una serie de recomendaciones que son importantes para eludir a los amantes de lo ajeno. Una de las primeras recomendaciones es dejar los coches aparcados en sitios luminosos o en garajes. También, se puede instalar el vehículo en sitios donde haya vigilancia, además de instalar tecnologías de alarmas que suelen ser muy útiles en estos casos.
Algunos sistemas ADAS tienen también una alerta para los usuarios que avisan que estos fueron manipulados. Los expertos aseguran que es necesario hacer un chequeo habitual del coche y de estos mecanismos para garantizar la seguridad, en la que se incluya la calibración de sensores y cámaras, así como la actualización del software. También, muchos recomiendan contratar un seguro que sea específicamente para este mecanismo y así evitar males mayores en el futuro.
