En plena celebración de Fitur, una de las ferias más importantes de turismo a nivel mundial, el Ayuntamiento de Madrid aprobó esta semana el Plan Estratégico de Turismo 2024-2027. Un movimiento clave para la capital dentro de una semana tan simbólica para este sector.
Dicho plan ha sido elaborado por el Área Delegada de Turismo en coordinación con el sector turístico madrileño. Y tiene por objetivo es asentar las bases de un modelo de calidad para el turismo de Madrid, alineado con la sostenibilidad y la identidad local del destino y basado en la colaboración público-privada, según ha destacado la vicealcaldesa y portavoz municipal, Inma Sanz.
Y que realmente esconde una apuesta por un sector al alza y que está siendo el motor de la economía de la capital en estos dos últimos años. Algo que ha desplazado la importancia de otros, que temen que sean desatendidos por las propias instituciones y genere dependencia y posibles desequilibrios que a la largan perjudiquen de forma global a la economía de la capital y de la Región.
HOJA DE RUTA TRAS EL MEJOR AÑO DE LA HISTORIA
La hoja de ruta estratégica fue aprobada después de que 2024 fuera el mejor año de la historia del turismo de la capital. En este periodo de tiempo Madrid ha batido el récord de número de visitantes, más de 11,2 millones de euros. Otro dato a tener en cuenta a nivel económico es que el internacional, 16.141 millones de euros, también ha sido otra cifra récord para el sector. Unos números que consolida de esta forma a Madrid como un destino global de referencia.
El nuevo Plan Estratégico de Turismo 2024-2027 nace con una serie de objetivos como el impulso de la gestión sostenible del destino, la descentralización del turismo, la generación de un turismo de experiencias, la atracción de visitantes de alto impacto y la revalorización de la industria turística, entre otros.
Por su parte, dicho el Plan Estratégico de Turismo de la capital se articula sobre tres premisas fundamentales: La redefinición, centrada en convertir a Madrid en una mejor ciudad para vivir, impulsando su esencia, su estilo de vida, cultura, gastronomía, tradiciones, talento y diversidad.
Una segunda basada en la regeneración, centrada en conseguir que Madrid sea una mejor ciudad para invertir, con proyectos que dinamicen la infraestructura de la ciudad y con la organización de grandes eventos que generen riqueza para la capital.
Y una tercera pata donde es vital la redistribución, centrada en un turismo equilibrado y sostenible que respete la convivencia con los vecinos, fomentando la desestacionalización y la descentralización de los flujos de visitantes.
SEGUNDO DESTINO URBANO MÁS ATRACTIVO DEL MUNDO
Con esta aprobación y esta reformada estrategia del sector Madrid sigue mirando al futuro del turismo desde las posiciones de liderazgo, después de ser nombrado en 2024 el segundo destino urbano más atractivo del mundo por el prestigioso Euromonitor, solo detrás de París y antes que Tokio. Una posición que explica el notable crecimiento del sector en la capital tras la pandemia, una tendencia que ya a finales de la anterior década dejaba ver la actual tendencia de del turismo madrileño.
Pero desde fuentes cercanas al consistorio madrileño han querido remarcar que la ciudad no busca un alza turístico a cualquier precio y que derive en problemas sociales con el resto de madrileños.
Por este motivo, la sostenibilidad, entendida en sus vertientes económica, social y medioambiental, jugará un papel fundamental en la implementación del plan. En el eje económico, se busca diversificar la oferta para atraer diferentes segmentos de mercado; innovar en tecnología y reforzar la marca Madrid como un destino de calidad reconocida.
Por otro lado, los indicadores clave en este conjunto incluyen el incremento de la estancia media, el aumento del gasto turístico, la ordenación de la oferta de alojamiento, la calidad del empleo en el sector turístico, el impacto económico de los grandes eventos y la innovación y digitalización del sector.
Por su parte, el eje social promueve la cohesión con la comunidad local, desarrollando prácticas turísticas que favorezcan la convivencia entre vecinos y visitantes; la accesibilidad e inclusividad del sector, así como el apoyo a los negocios locales. En este apartado, destacan los indicadores clave como el control de la presión turística, el índice de satisfacción del visitante, el índice de satisfacción ciudadana con el turismo, la formación y capacitación del personal del sector y la reducción de la estacionalidad turística.
Por último, en el eje medioambiental, se impulsa que Madrid sea un destino neutro en carbono mediante la reducción de emisiones, la movilidad sostenible y la implantación de estándares más altos de sostenibilidad en los principales eventos de la ciudad. Los indicadores clave en esta materia incluyen la reducción de las emisiones de CO2, la compensación de impactos ambientales de grandes eventos, la certificación ecológica de establecimientos turísticos y el aumento de la movilidad sostenible.
El entorno del Ayuntamiento también ha querido explicar que «el Plan Estratégico de Turismo 2024-2027 se acompaña de una serie de iniciativas concretas que están asociadas a los objetivos fundamentales y que comenzaron a desplegarse en junio del año pasado». «Con la aprobación del plan, el Ayuntamiento de Madrid confirma su compromiso con la gestión sostenible del destino, la proyección internacional de la ciudad y la búsqueda continua de la excelencia para que el turismo siga siendo un motor de riqueza, bienestar y orgullo para todos los madrileños», finalizan.